Las dos compañías detrás de Stint y dos ejecutivos están siendo procesadas. Habrían sabido que el vagón eléctrico no era seguro. Pero, ¿qué pasa con el gobierno que estaba de acuerdo con que los Stint salieran a la carretera?
Si las empresas quieren poner un nuevo producto en circulación, primero deben averiguar si es seguro. Es por eso que en 2011 se presentó una solicitud al Ministerio de Infraestructura y Gestión del Agua. Los demandantes habían desarrollado un vagón eléctrico especialmente para guarderías con el que podían transportar hasta diez niños: el Stint.
El hecho de que se tratara de un producto nuevo y único dificultaba la evaluación. Porque, ¿qué tipo de vehículo es el Stint? Al final, el ministerio decidió que el carro encajaba mejor en la categoría de ‘ciclomotores especiales’. Posteriormente, dos autoridades tuvieron que comprobar si el Stint cumplía con los requisitos establecidos para estos ciclomotores especiales.
Wat is er aan de hand met de Stint?
- Het Openbaar Ministerie (OM) vervolgt de bedrijven achter de Stint en twee leidinggevenden, omdat ze zouden hebben geweten dat de bolderkar niet voldeed aan de veiligheidseisen. Ze verdenken de leidinggevenden ook van valsheid in geschrifte.
- De vervolging is het resultaat van een jarenlang durend onderzoek na het fatale ongeluk in 2018. Daarbij botste een Stint op een spoorwegovergang in Oss tegen een rijdende trein. Het ongeval kostte vier jonge kinderen het leven. Een ander kind en diens begeleider raakten zwaargewond.
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Ambas autoridades rechazaron Stint on (algunos puntos).
Con el siguiente consejo, empieza a irritarte. Una de esas autoridades, la RDW, tuvo que mirar la tecnología detrás del Stint. Piense en la velocidad máxima, la construcción y el mecanismo de frenado. Pero esa evaluación no debería costar demasiado dinero ni ser demasiado extensa.
Debido a ese conjunto limitado de requisitos, no había suficiente información sobre las “deficiencias en el diseño o el proceso de fabricación”, concluido la Junta de Seguridad Holandesa (OVV) en 2019. Los propios empleados de RDW también habían planteado este punto: la evaluación no encajaba bien con Stint, especialmente con “el uso del vehículo para diez niños”.
El ministerio finalmente recibió un consejo en el que se rechazó el Stint en cuanto al ancho, pero se aprobó en una serie de puntos que en realidad no estaban en orden. Esto se debe a las reglas limitadas, por lo que, entre otras cosas, el control de los frenos no era bueno.
El segundo organismo, SWOV, tuvo que analizar la seguridad vial y también llegó a una conclusión negativa. El instituto no consideró seguro el carro de mano eléctrico, en parte porque no se necesitaba una licencia de conducir para ello. Como resultado, un joven de dieciséis años sin experiencia podría participar en el tráfico con un balde lleno de niños.
Decisión bajo presión política y social
Entonces, dos recomendaciones negativas y el Stint aún podía salir a la carretera. ¿Cómo es eso posible? El OVV vio que el ministerio incluyó los informes en la decisión. Pero eso no condujo a una desaprobación del Stint. Según el ministerio, el vagón eléctrico era lo suficientemente seguro, pero el fabricante tuvo que tener en cuenta los puntos de los informes.
El OVV llega a una conclusión difícil en el informe: cuando se admitió el Stint, no había suficiente información sobre la seguridad del vehículo. La entonces ministra Cora van Nieuwenhuizen se guió principalmente por “el deseo político y social de organizar rápida y fácilmente la admisión de vehículos nuevos e innovadores”. La decisión de permitir el vagón fue tomada por un funcionario inferior del ministerio, pero el ministro es responsable de esto.
“Nosotros decimos: política, no tome más el asiento del organismo de inspección”, dijo el entonces presidente Jeroen Dijsselbloem en la presentación del informe. Fidelidad. “No ejerzan más presión sobre la ministra y sus servicios para que pongan rápidamente en circulación un vehículo específico, ya sea el Stint o el Segway. Ocurrirán accidentes”.
Después del informe, Van Nieuwenhuizen se disculpó por el papel de su ministerio. Reconoció que al Stint nunca se le había permitido salir a la carretera de esta forma. “Me resulta muy doloroso y lo siento mucho”.
Hoe ging het verder?
- Van Nieuwenhuizen liet de procedure voor de keuring wijzigen. Er kwamen strengere regels, zodat bijvoorbeeld ook naar het productieproces wordt gekeken. Uiteindelijk mocht een aangepaste versie van de Stint (de zogenoemde BSO-bus) in 2020 weer de weg op.
- Het Openbaar Ministerie (OM) oordeelde eerder dat de bestuurder van de Stint strafrechtelijk niets kan worden verweten. Ze had er alles aan gedaan om de bolderkar te laten stoppen. De precieze oorzaak van het ongeluk is niet achterhaald.
- Wanneer de zaak tegen de bedrijven en leidinggevenden voor de rechter komt, is nog niet duidelijk.