Cientos de neofascistas vestidos de negro realizaron el “saludo romano” -un movimiento del brazo en el que se basa el saludo hitleriano- durante una conmemoración en Roma este fin de semana. Hasta el momento se han presentado cargos contra diez personas. ¿Qué clase de saludo es éste y cómo reaccionan los italianos?
¿Qué pasó?
El domingo tuvo lugar en Roma la conmemoración anual de un atentado de 1978, cuando dos miembros de un movimiento juvenil de extrema derecha fueron asesinados cuando salían de la oficina del partido en Via Acca Larenzia en Roma. Un tercer miembro murió en el enfrentamiento posterior con la policía. La extrema derecha italiana conmemora cada año el atentado, pero esta vez la concurrida edición también atrajo por primera vez la atención internacional. Millones de personas en las redes sociales vieron las imágenes que mostraban a cientos de hombres vestidos de negro levantando la mano derecha en el aire. El gesto recuerda al saludo hitleriano, pero en realidad es un predecesor italiano: el saludo romano.
¿Qué es el saludo romano?
Es dudoso que el llamado saludo romano alguna vez fuera realmente una costumbre entre los antiguos romanos, de donde toma su nombre. Lo que está claro es que el gesto del brazo se hizo famoso bajo el fascismo de Benito Mussolini. En 1925, tres años después de su toma del poder, Mussolini incluso elevó el gesto a saludo oficial del gobierno fascista. El saludo hitleriano, que se hizo obligatorio en la Alemania nazi en 1933, se inspiró en el saludo romano.
En la Italia moderna, excusar o glorificar el fascismo está prohibido por ley. Sin embargo, hacer el saludo romano no es punible en todos los casos, como lo dictaminan los jueces en la práctica, a diferencia del saludo hitleriano en Alemania. En Italia, algunos jueces consideran punible el saludo fascista, mientras que otros dan prioridad a la libertad de expresión en un contexto conmemorativo.
Precisamente este jueves, el Tribunal de Casación emitirá una sentencia importante en el caso contra ocho neofascistas que saludaron en otra conmemoración en 2014. Inicialmente fueron absueltos, pero en apelación fueron condenados a dos meses de prisión y una multa de 200 euros. El Tribunal dictará la próxima semana una sentencia definitiva sobre unos hechos, que ya cumplen casi diez años, y que se siguen con más interés que nunca debido al reciente incidente.
¿Cuál es el impacto de las imágenes en Italia?
Incidentes como el del domingo pasado ocurren regularmente en Italia, por lo que los italianos se sorprenden menos que la audiencia internacional que los observa. Por ejemplo, el político de derecha Romano La Russa, hermano del presidente del parlamento Ignazio La Russa, del partido gobernante Fratelli d’Italia, quedó desacreditado unos días antes de las elecciones de septiembre de 2022 por saludar en un funeral. También tienen lugar anualmente manifestaciones con simbolismo fascista en la tumba de Benito Mussolini, en su ciudad natal de Predappio, convertida en lugar de peregrinación de la extrema derecha.
Las manifestaciones fascistas no son nada nuevo en Italia, aunque la participación en la conmemoración del domingo fue mayor que en otros años. Pero es principalmente la indignación internacional la que ahora parece estar poniendo el asunto bajo una luz diferente en Italia. Los políticos, incluso aliados del gobierno italiano como Manfred Weber, expresaron su disgusto en el Parlamento Europeo. El miércoles, la policía italiana anunció que había identificado a un centenar de personas en las imágenes. Hasta el momento, el fiscal ha presentado cargos contra diez personas, pero la investigación aún está en curso. Según el periódico la Republica En la conmemoración también estuvieron presentes al menos tres neonazis rusos y dos alemanes.
¿Cómo responden los políticos?
La primera ministra, Giorgia Meloni, guardó silencio sobre el tema durante días, a pesar de las presiones de la oposición para que se distanciara de la conmemoración. El jueves por la tarde, en una declaración sobre otro tema, se refirió al tema sólo con un disimulado desdén, hablando de “ataques gratuitos y polémicas instrumentales” por parte de la oposición.
Los representantes del partido de Meloni asistieron a la conmemoración oficial del ataque durante la jornada del domingo, pero deliberadamente no asistieron a la ceremonia más extrema de la tarde. Los Fratelli d’Italia de Meloni utilizan este camino intermedio desde hace varios años. Por un lado quieren expresar su apoyo a la causa de la extrema derecha, por otro lado prefieren mantener a cierta distancia a los grupos más militantes. En esta misma línea, el presidente del Parlamento, Ignazio La Russa, afirmó que su partido no tiene nada que ver con el asunto. “No tenemos que distanciarnos de nada”.