El cohete gigante Starship de SpaceX explotó después de su primer lanzamiento el jueves en un revés para la compañía de Elon Musk y su esfuerzo por construir una nave espacial capaz de volar a Marte.
El cohete de casi 400 pies de altura, el más poderoso jamás lanzado, partió de su base a lo largo de la costa del Golfo en el sur de Texas alrededor de las 8:30 am hora local. Se elevó en una bola de fuego de sus 33 motores Raptor y alcanzó una altitud de casi 40 km antes de caer hacia la Tierra y explotar.
Musk, que estuvo presente en el centro de control de SpaceX para el lanzamiento, pasó días antes hablando sobre las expectativas del enorme cohete y advirtiendo que era poco probable que completara todas las fases de su primer intento de vuelo espacial.
El cohete no tripulado debía alcanzar la órbita como parte de un vuelo de 90 minutos que lo vería aterrizar frente a la costa de Hawái. El vuelo parecía ir según lo planeado durante los primeros tres minutos y medio, hasta la separación prevista del propulsor de la primera etapa.
Después de que el cohete volcara, como parte de una maniobra planificada para preparar el regreso del propulsor reutilizable a la Tierra, la primera etapa no se separó y Starship cayó hacia atrás antes de explotar.
Starship se elevó en una bola de fuego de sus 33 motores Raptor y alcanzó una altitud de casi 40 km antes de caer hacia la Tierra y explotar © SpaceX a través de Reuters
“¡Felicitaciones al equipo de @SpaceX por un emocionante lanzamiento de prueba de Starship! Aprendí mucho para el próximo lanzamiento de prueba en unos meses”, escribió Musk en Twitter.
“Fue un éxito parcial, no fue un gran revés”, dijo Laura Forczyk, ex funcionaria de la NASA y ahora consultora espacial en Astralytical. “La parte más importante fue que se lanzó; ese es todo un logro para un nuevo cohete, particularmente uno tan complejo como Starship”.
El lanzamiento se produjo tres días después de que el primer intento de lanzamiento fuera cancelado en el último minuto debido a problemas con la presión del combustible en el propulsor principal del cohete.
Aunque se diseñó para cumplir el objetivo de Musk de llegar a Marte y convertir a la humanidad en una especie multiplanetaria, el cohete Starship podría transformar la economía de los vuelos espaciales mucho antes y mucho más cerca de casa.
Capaz de transportar hasta 100 toneladas a la órbita terrestre baja, Starship podría reducir en gran medida el costo de poner los satélites en órbita. También está previsto que participe en las misiones de la NASA para devolver astronautas a la Luna a finales de esta década.