El 23 de mayo de 2022, la Oficina del Comisionado de Información (ICO), el equivalente a la Comisión Nacional de Información y Libertades (CNIL) en Reino Unido, le impuso una multa de 7,5 millones de libras esterlinas (8,85 millones de euros). La start-up americana especializada en tecnologías de reconocimiento facial para las fuerzas del orden ha sido sancionada por el uso ilícito de imágenes de particulares recogidas en internet y redes sociales.
Clearview AI ordenó pagar una multa y eliminar todos los datos sobre los británicos
El pasado mes de julio, la ICO ya tenía en la mira a Clearview AI. En efecto, la autoridad británica ha querido imponer una multa de 17 millones de libras esterlinas (casi 20 millones de euros) a la empresa americana. Con la ayuda de la Oficina del Comisionado de Información de Australia, la autoridad australiana equivalente al ICO, los dos organismos se han centrado en las acciones de la empresa. No dudó en recopilar datos de libre acceso en Internet (imágenes, datos biométricos, etc.) con el fin de utilizarlos para alimentar sus tecnologías.
¿Pronto centros de datos en la Luna para guardar datos de todo el mundo?
Unos meses después, el veredicto cae y obliga a la empresa especializada en reconocimiento facial a pagar una multa menor. Sin embargo, el ICO ha emitido otra medida: ordena a Clearview AI que deje de recopilar y utilizar los datos personales públicos de los residentes británicos, así como eliminar los que ya tienen.
Clearview AI habría recopilado más de 20 mil millones de imágenes en Internet
Clearview AI es conocida por brindar a las fuerzas del orden público una solución para reconocer a ciertas personas en momentos. Todo lo que tiene que hacer es descargar una imagen clara de una persona cuya identidad desea conocer, y el software busca en la base de datos para ver si hay una coincidencia entre esta imagen y la proporcionada por la policía.
Por lo tanto, para que esta herramienta funcione y sea efectiva, es necesario tener la mayor cantidad de datos posible para que las comparaciones sean lo más relevantes posible. Sin embargo, esto plantea una cuestión ética sobre el uso de estos datos. El ICO, por supuesto, condenó a la empresa por usar imágenes de residentes del Reino Unido.
Según la autoridad británica, la empresa habría recopilado más de 20.000 millones de instantáneas de rostros de personas de todo el mundo para almacenarlas en una base de datos. Todas estas imágenes fueron recopiladas sin información o consentimiento con respecto a su recopilación o uso futuro.
Clearview AI, un jugador controvertido en el mundo del reconocimiento facial
Ante la reacción del Reino Unido, varios países ya habían expresado su descontento con las acciones de Clearview AI. En Francia, la CNIL pidió a la start-up estadounidense que detuviera el ” reutilización de fotografías accesibles en Internet “. En Estados Unidos, su país de origen, la empresa ya no puede vender su base de datos a empresas privadas.
Actualmente, se cree que las tecnologías de reconocimiento facial de la startup son utilizadas por varios miles de departamentos de policía de todo el mundo. También se utiliza en el contexto de la guerra de Ucrania por parte de los ucranianos para intentar identificar a los agentes rusos, para intentar reunir a los refugiados separados de sus familias o para identificar a los muertos.