Irán volvió a reducir el número de muertos por el ataque en el país el miércoles. Los dos atentados con bombas en la ciudad de Kerman mataron no a 95 personas, sino a 84, informan las autoridades iraníes.
Irán ajustó previamente el número de muertos de 103 a 95. Según el ministro de Salud iraní, Bahram Eynollahi, los nombres de algunas víctimas se contaron dos veces.
Según las últimas cifras de los servicios de emergencia iraníes, 248 personas resultaron heridas. Varios heridos se encuentran en estado crítico. Por lo tanto, el número de muertos aún podría aumentar.
Las explosiones ocurrieron durante una ceremonia en conmemoración del alto comandante Qassem Soleimani, quien murió en un ataque estadounidense en 2020. Las explosiones tuvieron lugar en el cementerio donde está enterrado Soleimani.
Soleimani era una figura de alto rango en el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica. Fue encargado especialmente de operaciones y misiones encubiertas en el extranjero, como en Irak y Siria.
Jamenei promete «represalias muy fuertes»
El ayatolá Ali Jamenei, líder supremo de Irán, ha prometido una «respuesta firme» al doble atentado del miércoles.
Mohammad Mokhber, el primer vicepresidente de Irán, también ha prometido venganza por las explosiones. «Los soldados de Soleimani les traerán una represalia muy fuerte».
Hasta el momento nadie se ha atribuido la responsabilidad de las explosiones. Estados Unidos no está detrás del ataque, afirmó el Departamento de Estado estadounidense en una conferencia de prensa. Tampoco tienen indicios de que Israel esté detrás de esto.
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