Un chalet en Heezerenbosch fue completamente destruido por un incendio el sábado por la tarde. El residente de la casa inhaló humo y fue trasladado al hospital en ambulancia. El fuego estalló alrededor de las tres menos diez.
El fuego fue difícil de extinguir, según el departamento de bomberos, ya que la casa está ubicada en medio del bosque. Al incendio acudieron dos camiones de bomberos y dos camiones cisterna. El cuerpo de bomberos pudo evitar que el fuego se extendiera a la reserva natural adyacente.
Unas pocas decenas de metros detrás de la casa en llamas hay una perrera. Los perros presentes fueron revisados por la Ambulancia de Animales, pero ningún animal había inhalado humo.
La causa del incendio es desconocida. Según los bomberos, el chalet se puede dar por perdido.