Carlo ya ha recogido 13 furgonetas con refugiados: ‘Están muy ansiosos’

Cuando Carlo van Hout de Boekel vio las imágenes de la guerra en Ucrania, ya no pudo quedarse quieto. El sábado, por tanto, diez autobuses con refugiados de Ucrania llegaron a su ciudad natal. «Realmente tienes que convencerlos de que vengan porque están muy ansiosos».

Anteriormente, Carlo, un carpintero en la vida cotidiana, ya conducía arriba y abajo con tres furgonetas. Diez más llegaron el domingo. Están llenos de refugiados de Ucrania que están varados en Polonia.

Carlo cuenta sus experiencias. En la estación de Cracovia, por ejemplo, se encontró con un grupo de refugiados que no querían ir, porque estaban convencidos de que la guerra terminaría en dos semanas. «Están sentados en la estación y no quieren ir a ningún lado, creen que pueden irse a casa en dos semanas». Pero el municipio de Cracovia quiere que se vayan, hay demasiados refugiados en la ciudad en este momento.

Según Carlo, la resignación prevalece entre los refugiados que sí quisieron venir. «Algunos simplemente dejan que suceda. Vi a mujeres y niños parados en una plaza mirando asombrados. Se suben y los puedes poner donde quieras, piensan que todo está bien». Carlo tiene claro que no todos tienen buenas intenciones: «Si ves lo que está pasando allí, eso es inhumano. Si los recojo, al menos terminarán bien». Para seleccionar familias anfitrionas, Carlo está en contacto con el municipio, que selecciona a las familias.

Los refugiados fueron recibidos el sábado con bocadillos de croquetas en el ayuntamiento de Boekel. No pudimos hacer ninguna pregunta a los propios ucranianos. Fue emocionalmente demasiado pesado para ellos, dice Carlo. «Tienes mucho trauma de esta manera. Hay niños con ellos. No tienes que acercarte a ellos, porque gritan todo junto. Vi a un niño pequeño que lloraba mientras dormía».

Y a Carlo tampoco le importa. «Tampoco siempre lo mantengo seco. No tengo que decir una palabra, porque luego me voy. Es muy emotivo». Mientras tanto, su trabajo normal como carpintero continúa. “También hago carpintería, aunque es difícil. Pero no tanto como lo que han experimentado estas personas”.



ttn-es-32