Casi 11.000 empleados, 24.000 de los cuales hasta ahora han tenido laasignación mensual De 350€. Son 4.100 personas las que están asistiendo a cursos de formación regional, 2.600 han recibido orientación especializada para la activación laboral y 1.600 han participado en proyectos de actividades colectivas promovidos por los municipios.
Estas son las cifras del Apoyo a la Formación y al Trabajo (Sfl), anunciadas por el Ministro de Trabajo, Marina Calderónla herramienta de activación laboral que comenzó el 1 de septiembre y a la que hasta ahora se han inscrito 160.000 personas, entre ellas sólo alrededor de un tercio de los ex asalariados Renta básicamientras que se aceptaron 56 mil solicitudes (viajamos a un ritmo de 6 a 8 mil por día).
Los componentes individuales de SFL pueden beneficiarse de unidades familiares entre 18 y 59 años en posesión de determinados requisitos de ciudadanía, residencia, residencia y económicos. De las 249.000 personas potencialmente empleables que permanecieron entre los beneficiarios de la Renta de Ciudadanía en los últimos meses, sólo el 20% solicitó el SFL, pero se trataba de personas pertenecientes a familias con un ISEE inferior a 6.000 euros, por lo tanto en una situación de dificultad económica que necesitan apoyo, el Ministerio de Trabajo, el INPS y la Anpal están llevando a cabo un estudio sobre los motivos de su afiliación limitada; algunos pueden haber encontrado trabajo, pero éste puede estar “sumergido”.
Desde septiembre han sido 150 mil ofertas de trabajo publicadas en la plataforma Siisl (Sistema de información para la inclusión social y laboral), con la advertencia de que una oferta también puede incluir múltiples puestos de trabajo. Los cursos de formación publicados ofrecen en total más de 700.000 plazas. Las cifras revelan también una participación todavía limitada en los cursos de formación gestionados por las regiones, por dos razones: algunas regiones del Centro y del Sur están muy retrasadas en el inicio de los cursos, algunas incluso están en cero.
Entre regiones Molise, Basílicata, Cerdeña, Apulia, pero también Sicilia destacan como los países más rezagados. Por otro lado, en el Centro-Norte, con niveles más bajos de desempleo (Emilia Romaña, Toscana, Véneto, por ejemplo) es difícil componer las clases porque se matriculan muy pocas personas. El Ministerio de Trabajo aspira a una mayor participación de los particulares, a través de agencias de empleo, pero existen limitaciones en las regulaciones de la UE.