El comportamiento de la afición rumana no ha pasado desapercibido y la UEFA podría abrir una investigación. Mientras tanto, tras el partido, el portero ucraniano se disculpó por el «pato» que rompió el empate
Tras los cánticos anti-Kosovo de la afición serbia en el partido contra Inglaterra, hoy ha llegado el turno de los ultras rumanos. Durante el partido ganado por su selección por 3-0 contra Ucrania, los aficionados en las gradas sintieron la necesidad de provocar a los ucranianos, dedicando cánticos de apoyo a Vladimir Putin, presidente de la Federación Rusa.
Volviendo al campo, hoy entre los principales «culpables» del nocaut se encuentra seguramente el portero ucraniano Andrij Lunin: en el minuto 29 cometió un error al desconectarse, devolviendo el balón al extremo rumano Dennis Man, que inmediatamente sirvió al capitán. Nicolae Stanciu para el gol del 1-0. «El mejor gol de mi carrera», declaró el jugador nacido en 1993 tras el partido.
Mi culpa
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Al final del partido, el portero del Real Madrid pidió disculpas: «Mi primer error cambió el rumbo del partido. Pedí disculpas a mis compañeros». El entrenador Rebrov también habló sobre la derrota: «Hay varios factores que influyeron en el partido. Tuvimos posesión del balón, pero no pudimos crear ocasiones. Nadie esperaba tal resultado. Pedimos disculpas a nuestros aficionados».
La Gazzetta dello Sport
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