Es la segunda carga del día, que recoge del granjero Harm Buist de Musselkanaal. “La situación parece un poco peor que el año pasado”, afirma. “Pero no sé por qué. Pero no estoy insatisfecho con el clima que hemos tenido. Aquí es agradable y seco, pero algunos colegas están muy mojados”.
Según Avebe, en lo que respecta al clima no sólo existen diferencias regionales, sino también locales. “Aún no podemos decir mucho sobre la calidad de la cosecha de patatas”, afirma la portavoz Joyce de Vries. “Ha sido una temporada errática, caracterizada por muchos extremos. Hemos tenido mucha humedad, pero también mucha sequía. Y condiciones de cultivo ideales para algunos productores. Eso siempre es emocionante”.
En octubre y noviembre debería quedar más claro sobre la calidad de las patatas que llegan. De vuelta en la fábrica, Mulder puede deshacerse de la carga después de que se hayan tomado dos muestras. “Bueno, ahí van”, dice, observando de cerca las cosas en sus espejos. “Esa fue otra carga”.
Y así seguirá durante los próximos meses. En octubre y noviembre, durante los meses de mayor actividad, se realizan alrededor de un centenar de envíos al día. Las patatas se procesan y el almidón y las proteínas que se extraen se utilizan para la alimentación y la industria. La campaña durará aproximadamente hasta mediados de marzo.