Cambios en la red eléctrica: Los operadores de red tendrán derecho a estrangular la electricidad en 2024


En Alemania, un cambio significativo en el sector eléctrico es inminente a partir de enero de 2024. En respuesta a los crecientes desafíos que plantea la creciente demanda de electricidad -particularmente de los automóviles eléctricos y las bombas de calor- a las redes de bajo voltaje existentes, los operadores de redes podrán limitar las compras de electricidad de los clientes bajo ciertas condiciones.

Causas, antecedentes y futura demanda eléctrica en Alemania

Las redes de baja tensión existentes en Alemania actualmente no están diseñadas para la creciente demanda de electricidad, provocada principalmente por la creciente proliferación de coches eléctricos y bombas de calor. Esto plantea un desafío importante para la red existente y tiene un impacto significativo en las necesidades de electricidad del país. En la reunión inaugural de la Plataforma del Sistema Eléctrico Climáticamente Neutro en febrero de 2023, el ministro federal de Economía, Robert Habeck, predijo que el consumo actual de electricidad aumentará de unos 550 teravatios hora a 700 o 750 teravatios hora en 2030 y podría incluso alcanzar los 1.000 teravatios hora en 2023. 2045.

En respuesta a la tendencia de aumento de la electrificación en Alemania, el gobierno federal tiene la intención de aumentar la participación de las energías renovables en la generación de electricidad a alrededor del 80 por ciento para 2030, un aumento significativo en comparación con la participación actual del 44,6 por ciento, afirmó. Este objetivo se refleja sobre todo en los esfuerzos por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero mediante la electrificación de diversas zonas.

Los operadores de redes de transmisión en Alemania desarrollan cada dos años un marco de escenarios que es examinado por la Agencia Federal de Redes y utilizado como base para planificar la futura expansión de la red eléctrica, como informa Bürgerdialog Stromnetz. Este marco incluye objetivos políticos climáticos, así como la transformación en diversos sectores económicos e incluye tres escenarios (A, B y C) que muestran cómo Alemania podría lograr un suministro de energía climáticamente neutro para 2045, continúa. En todos los escenarios, se espera un aumento significativo de la generación de electricidad a partir de fuentes renovables para 2037. A este aumento contribuyen significativamente el cambio a vehículos propulsados ​​por baterías, el uso de bombas de calor y sistemas power-to-heat, así como la mayor demanda de electricidad en la industria, especialmente para la producción de hidrógeno respetuoso con el medio ambiente.

Para responder en última instancia a esta evolución, la Agencia Federal de Redes introdujo una modificación en la Ley de la Industria Energética que permite un control orientado a la red. Esta innovación tiene como objetivo ayudar a adaptar las redes de baja tensión al fuerte aumento de la demanda de electricidad en el futuro y garantizar la seguridad del suministro en Alemania. Pero, ¿cómo debería funcionar el control orientado a la red?

Así es la nueva regulación de enero de 2024

Las nuevas regulaciones entrarán en vigor a partir de enero de 2024 y permitirán a los operadores de red restringir las compras de electricidad de los clientes en determinadas situaciones para evitar sobrecargas en la red eléctrica, como informa la Agencia Federal de Redes en un artículo en línea. En particular, los operadores de red pueden limitar temporalmente el consumo de electricidad de nuevas bombas de calor controlables o estaciones de carga de pared, las llamadas Wallboxes. Durante estos períodos de sobrecarga, los operadores de red pueden reducir el suministro eléctrico hasta 4,2 kilovatios, según la Agencia Federal de Redes. Esta potencia mínima reducida permite que las bombas de calor sigan funcionando y que los coches eléctricos se carguen para una distancia de 50 kilómetros en unas dos horas, mientras que la electricidad doméstica normal no se ve afectada por esta medida.

La base jurídica de estas normas es el artículo 14a de la Ley de la Industria Energética, que entrará en vigor a partir de enero de 2024. La ley determina qué consumidores se ven afectados por la limitación y que la tarifa de la red debe reducirse en consecuencia, como continúa diciendo. Como compensación por el control de sus dispositivos orientado a la red, los hogares afectados reciben un descuento, que se paga como una tarifa fija anual en la tarifa de la red o como una reducción del precio de la mano de obra eléctrica en un 60 por ciento para los dispositivos afectados. Según la Agencia Federal de Redes, a partir de 2025 los consumidores también tendrán la opción de elegir una tarifa de red variable en el tiempo, que prevé costes más bajos en momentos de baja utilización de la red.

Sin embargo, la Agencia Federal de Redes parte de que tales intervenciones por parte de los operadores de red sólo serán necesarias en casos excepcionales y no conllevarán ninguna pérdida significativa de comodidad. Para garantizar la transparencia, los operadores de redes están obligados a publicar dichas intervenciones de control en plataformas comunes de Internet. Con ello se pretende que el público pueda comprender los problemas de sobrecarga en áreas individuales de la red. Se aplican regulaciones transitorias a largo plazo a los sistemas existentes que ya cuentan con un acuerdo de control por parte del operador de red. Las inversiones sin dicho acuerdo quedarán permanentemente exentas de las nuevas normas, pero podrán participar voluntariamente. Los acumuladores nocturnos están permanentemente exentos de la nueva normativa, concluye.

Voces críticas desde la política

El reglamento, que entrará en vigor en Alemania en enero de 2024, ha provocado numerosas reacciones y críticas. El experto en energía del FDP, Michael Kruse, describió los planes al periódico Bild como una «expresión de fracaso político» y expresó su preocupación de que el cambio a la electromovilidad pudiera correr peligro si los consumidores sólo dispusieran de electricidad esporádicamente para sus vehículos. Esta crítica subraya la preocupación de que los recortes frecuentes puedan debilitar el apoyo a la transición energética en Alemania.

Kruse enfatizó que los operadores de red que reducen las compras de electricidad también son responsables de la rápida expansión de la red. Esta opinión también la comparte la Agencia Federal de Redes, cuyo presidente, Klaus Müller, subrayó que este tipo de intervenciones en el suministro eléctrico sólo deberían realizarse en casos excepcionales, como afirma.

El periódico «Bild» y Mark Helfrich, portavoz de política energética del grupo parlamentario de la Unión, se pronunciaron a favor de considerar los cortes de electricidad como un instrumento de emergencia. Helfrich advirtió que sin coches eléctricos que se carguen rápidamente y casas cálidas, la transición a la movilidad y la calefacción fracasaría. La Agencia Federal de Redes señaló que la mayoría de los consumidores apenas notarían las intervenciones porque la electricidad doméstica no se vio afectada y se garantizó un rendimiento mínimo, concluyó.

D. Maier / equipo editorial finanzen.net



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