MIRAR. El panda blanco intenta ponerse en contacto con sus compañeros.
El animal fue visto y fotografiado por primera vez en abril de 2019 cuando aún era un cachorro. La primera -y también la última vez- que se filmó al animal fue en 2020. Hasta ahora. Las nuevas imágenes de la cámara muestran cómo el panda intenta contactar a sus contrapartes en blanco y negro.
La mutación genética no afectaría demasiado la vida del panda albino. El animal gozaría de buena salud. “El espécimen se veía fuerte y sus pasos eran firmes”, dijo a los medios chinos Li Sheng, investigador de la Universidad de Pekín especializado en osos. “Hasta ahora podemos decir que al panda blanco le está yendo muy bien en su grupo de especies y en su entorno natural”.
Todavía no está claro si el gen se hereda y se transmite de manera constante en la población de pequeños pandas. También se necesita más investigación de seguimiento.
Este espécimen único es actualmente el único jamás observado. Se han visto pandas gigantes marrones raros en las montañas de Qinling en China antes. Según los científicos, existe una mutación genética tanto en el panda blanco como en el marrón.