Después de muchos meses turbulentos, la etapa de Claus Vogt como jefe del club suabo termina en la asamblea general. Pero no es la única consecuencia personal en el presidium.
Claus Vogt ha sido destituido como presidente del VfB Stuttgart. En la asamblea general, el 86,03 por ciento de los socios presentes votaron en contra de que el hombre de 54 años siguiera al frente del club.
«Por supuesto que estoy decepcionado, por supuesto que lo tengo en el corazón. Desde mi punto de vista, lo he dado todo por el VfB durante los últimos seis años», afirmó Vogt, elegido sucesor de Wolfgang Dietrich en diciembre de 2019. con voz conmovida. «A partir de ahora volveré a ser simplemente Claus y un aficionado del VfB».
Rainer Adrion tampoco ocupa ya el cargo de vicepresidente. Después de que el 70,02 por ciento de los miembros presentes votaran en contra, anunció su retirada.
La afición organizada del club de la Bundesliga ya se había pronunciado anteriormente contra Vogt y Adrion y había presentado solicitudes de deselección. El trasfondo de estas disputas es el supuesto incumplimiento de una promesa hecha durante muchos años en relación con la escisión del departamento profesional, según la cual el presidente del club debería seguir siendo siempre el presidente del consejo de supervisión. Ahora está dirigida por Tanja Gönner.
Una parte de la escena de aficionados organizada se sintió traicionada después de perder esta posición tras la entrada del fabricante de automóviles deportivos Porsche como inversor. Consideran que, como resultado, la influencia de los miembros está disminuyendo y también han pedido que todo el comité ejecutivo dimita por falta de transparencia.
Las mociones estaban originalmente programadas como puntos 12 y 13 de la agenda. Pero tras una votación al inicio del evento, se cambió el orden y se adelantaron los puntos.