«Sé que es difícil tratar con adolescentes… pero VAMOS», escribió Spears, de 40 años, en una larga publicación. “Tienes grosero y luego viene ODIOSO. Cuando me visitan, entran por la puerta, van directamente a su habitación y cierran la puerta. (…) Yo estoy como: para qué vienes si ni siquiera vienes”.
Spears dice que los chicos solían visitarla dos o tres días a la semana. Aunque ella estaba ‘bien’ cuando le indicaron que querían venir menos, lo encontró ‘bastante difícil’. «¡No los he visto desde entonces!»
Según la cantante, sus hijos actualmente tienen «una edad extraña». «No sé qué les pasa por la cabeza. Siempre he probado de todo y tal vez por eso dejaron de visitarme”.
La decepción de Spears se produce después de que el ex esposo Kevin Federline, el padre de Sean y Jayden, dijera ampliamente a los medios que la cantante ya no ve a sus hijos. Spears declaró anteriormente que estaba muy triste por haber dicho esto en público.