En el mercado de la formación no se habla de buen humor: según una encuesta entre jóvenes de 14 a 25 años, uno de cada cuatro se queja de que en Alemania no hay suficientes plazas de formación. Una de las razones por las que las empresas y los potenciales aprendices no pueden encontrarse es probablemente la falta de publicidad de las vacantes en los canales sociales adecuados. Este es el resultado de una encuesta conjunta representativa de jóvenes y empresas realizada por la Fundación Bertelsmann y el Instituto Económico Alemán (IW).
Las prácticas se buscan principalmente online
Básicamente, los jóvenes y las empresas están de acuerdo: la búsqueda de una plaza de formación se realiza online. Ambos son los que más utilizan los anuncios de empleo en línea, seguidos de la colocación a través de la Agencia Federal de Empleo. Para el estudio, el Instituto Iconkids & Youth encuestó en febrero y marzo a más de 1.700 jóvenes de entre 14 y 25 años por encargo de la Fundación Bertelsmann. IW encuestó a directores de recursos humanos de 895 empresas entre marzo y mayo.
Las diferencias se pueden ver, entre otras cosas, en las redes sociales. Mientras que las generaciones más jóvenes son más activas en plataformas como YouTube, Tiktok o Snapchat, el 70 por ciento de las empresas publican sus anuncios de empleo en Facebook, aunque sólo uno de cada cuatro jóvenes pasa tiempo allí. El 30 por ciento de ellos dice que usa Tiktok “a menudo”, lo que a su vez hace menos del cuatro por ciento de las empresas. Según el estudio, donde los dos grupos encuentran puntos en común es Instagram.
“Las empresas deberían adaptar más su comunicación al comportamiento mediático de los jóvenes para llegar a más candidatos potenciales”, recomiendan los autores del estudio. Tampoco se debe descuidar la comunicación analógica, ya que los anuncios de empleo en los periódicos o en los tablones de anuncios son utilizados por personas más jóvenes con menor nivel educativo.
Las habilidades son más importantes que las calificaciones escolares
Casi tres cuartas partes de las empresas consideran que las capacidades y características de los solicitantes son cada vez más importantes, mientras que las cualificaciones formales son cada vez menos importantes. Es necesario comunicar mejor esto: el estudio muestra que sólo un poco más de la mitad de los jóvenes están convencidos de que sus habilidades personales son importantes. Un tercero incluso contradice expresamente esta valoración.
“Los jóvenes no deberían dejar de postularse, aunque tengan peores calificaciones, sino confiar en sus puntos fuertes”, subraya Clemens Wieland, experto de la Fundación Bertelsmann para la Formación Profesional.
La formación tiene buena reputación: más del 80 por ciento de las empresas y los jóvenes la consideran una buena base profesional. Seis de cada diez encuestados también piensa que con formación te puedes permitir “una buena vida” en el futuro. Sin embargo, más del 45 por ciento de las empresas y un buen 55 por ciento de los jóvenes consideran que la formación dual tiene poco valor en la sociedad. (dpa)