1/3 Foto de : Bart Meesters
En la calle Molenstraat de Boekel, varios hogares sufren un intenso olor a huevo podrido. No se sabe de dónde viene esto. Varias familias se refugian en un café cercano porque el hedor es muy fuerte. Los bomberos están en el lugar para limpiar el alcantarillado e investigar.
“En algunos lugares el olor es menor, pero en otros casi te duele el cuello”, dice un corresponsal del 112. El olor se extendía principalmente en varias casas y se podía oler alrededor de las alcantarillas.
Sin embargo, el municipio aún no se atreve a decir de dónde viene el olor. En algunas casas el hedor es tan fuerte que los residentes han sido evacuados. Aún no se sabe si podrán volver a dormir en casa esta noche. Hasta entonces, los atienden en un café de la misma calle.