Los grandes almacenes holandeses De Bijenkorf cierran 2021 con una pérdida operativa de 33,3 millones de euros. Pero los grandes almacenes de lujo también tienen buenas noticias: las ventas del año pasado fueron casi un diez por ciento más altas que en 2020. De Bijenkorf también es optimista sobre el futuro; la compañía espera lograr mejores resultados en 2022 que en los años previos al brote de coronavirus.
Según la compañía, parte de la pérdida se debe a los cierres por coronavirus del año pasado, durante los cuales las siete sucursales en los Países Bajos tuvieron que permanecer cerradas durante semanas. El director ejecutivo, Giovanni Colauto, dijo el miércoles cuando se anunciaron las cifras anuales: «El segundo período de Corona nos ha obligado a mostrar inventiva, creatividad y resiliencia. Esta actitud ha valido la pena».
El número de visitantes en línea aumentó en un diez por ciento, lo que se reflejó en un aumento de los ingresos en línea en un diez por ciento. Bijenkorf tiene siete tiendas en los Países Bajos, en Ámsterdam, La Haya, Róterdam, Eindhoven, Utrecht, Amstelveen y Maastricht. Hay tiendas web en los Países Bajos, Bélgica, Alemania, Francia y Austria. En 2021 se abrieron nuevas tiendas web en Mónaco y Luxemburgo.
Bijenkorf pertenece a la empresa matriz Selfridges. La empresa fue absorbida por la austriaca Signa Holding y el Thai Central Group a finales del año pasado. La adquisición, que incluye grandes almacenes en el Reino Unido, Irlanda y Canadá además de Bijenkorf, se completará en los próximos meses. Se espera que los nuevos propietarios inviertan mucho en los grandes almacenes y tiendas web de De Bijenkorf. Es probable que continúe la estrategia iniciada entre los propietarios de Selfridge para centrarse en productos de lujo y clientes de alto poder adquisitivo.
Los expertos creen que esta es una sabia decisión. A nivel mundial, a las tiendas de lujo les está yendo mejor que a los minoristas del mercado medio. En 2020, De Bijenkorf obtuvo fondos GO, un préstamo con garantías del gobierno holandés, para ayudar a superar la crisis de Corona. Era un préstamo de 30 millones de euros para el que el gobierno proporcionaría una garantía del 80 por ciento en caso de quiebra de la empresa. El año pasado, la empresa reembolsó $11,25 millones de ese préstamo. Además, los grandes almacenes de lujo han recibido préstamos de su antigua matriz Selfridges y bancos de 10 y 26 millones de euros. La empresa espera que los nuevos propietarios asuman o paguen estos préstamos.
Esta publicación traducida está escrita por Judith Munster y apareció anteriormente en FashionUnited.nl.