El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, llegaron a un acuerdo preliminar el sábado por la noche (hora local) para elevar el techo de la deuda del gobierno de los Estados Unidos. Estados Unidos parece estar fuera de la zona de peligro por el momento, pero el Congreso todavía tiene que votar el acuerdo.
Durante una llamada telefónica de una hora y media, Biden y McCarthy discutieron el acuerdo. «Acabo de hablar por teléfono con el presidente. Después de meses de perder el tiempo y negarnos a negociar, hemos llegado a un acuerdo en principio digno del pueblo estadounidense», tuiteó McCarthy sobre el acuerdo.
Según las fuentes, el techo de la deuda se elevará durante dos años. Aún no se conocen más detalles. Se espera que el proyecto de ley se finalice en detalle el domingo. El Congreso votará el acuerdo el miércoles. Si hay suficientes votos, el acuerdo es definitivo.
Biden dice que el proyecto de ley es un «compromiso, lo que significa que no todos obtienen lo que quieren. Pero evita lo que podría haber sido una bancarrota catastrófica y condujo a una recesión económica, pensiones devastadas y la pérdida de millones de empleos».
Estados Unidos se quedaría sin dinero el 5 de junio si no se llega a un acuerdo entre republicanos y demócratas. Podría haber grandes disturbios financieros en todo el mundo. Gran parte del gobierno estadounidense también podría paralizarse.
Elevar el techo de la deuda suele ser una rutina en los Estados Unidos. Esta vez fue diferente por las tensiones entre republicanos y demócratas. A principios de esta semana, parecía haber avances en las conversaciones entre las dos partes. Pero todavía diferían en algunos puntos importantes.