La razón detrás de la transferencia de funciones y la disolución del parlamento aún no está clara, pero el gobierno de coalición del primer ministro Naftali Bennett ha perdido la mayoría en el parlamento desde principios de abril. Eso sucedió cuando una miembro del partido de Bennett, Idit Silman, retiró su apoyo al partido y al gobierno. Bennett se quedó con 60 de los 120 escaños en el parlamento.
Los medios israelíes inmediatamente especularon que Bennett presionaría rápidamente para nuevas elecciones. Después de todo, la posibilidad de que la oposición encabezada por el ex primer ministro Benjamin Netanyahu pudiera obtener una mayoría se consideró pequeña. La actual coalición de gobierno de Bennett está formada por nacionalistas radicales de derecha, partidos de centro, partidos de izquierda y árabes.