Aumento de los costes energéticos: ¿vale la pena cambiar a la calefacción con hidrógeno?


Si calientas con gas y quieres estar calentito te saldrá caro. El hidrógeno es muy popular, pero ¿tiene sentido un cambio?

El hidrógeno como fuente de energía del futuro

El hidrógeno ya se considera la nueva fuente de energía del futuro. El gobierno federal alemán también lo anuncia en su sitio web. Ya existen varios proyectos para seguir avanzando en el uso del hidrógeno. El hidrógeno se considera la tecnología del futuro que puede hacernos independientes de los combustibles fósiles en el futuro. El gobierno federal espera que el hidrógeno, que puede utilizarse de forma flexible y transportarse fácilmente, permita una transformación de la industria alemana respetuosa con el clima.

¿Cambiar al hidrógeno en su hogar ahora?

Los altos costos de la energía están causando problemas a la gente y muchos buscan alternativas. Quienes calientan con gas se ven especialmente afectados por los altos precios del gas. Un calentador de hidrógeno puede aportar muchas ventajas porque las pilas de combustible no sólo pueden generar calor, sino también electricidad. Sin embargo, el concepto de calefacción y suministro de energía debe adaptarse exactamente a las necesidades del edificio, advierte la empresa de calefacción Buderus. Por ejemplo, el edificio suele necesitar una conexión a la red de gas porque para producir hidrógeno se necesita gas o electricidad.

Las ventajas del calentamiento con hidrógeno, sin embargo, son su larga vida útil, que actualmente es sólo una suposición. Esto todavía no se puede decir con certeza porque todavía hay muy pocos datos, escribe el Berliner Morgenpost. Sin embargo, si se decide por un calentador de hidrógeno, puede esperar un calentador muy silencioso, cuya compra está subvencionada por el gobierno.

Si combina la calefacción por hidrógeno con un sistema fotovoltaico, también podrá volverse menos dependiente de los proveedores de electricidad. Cualquiera que decida utilizar la calefacción por hidrógeno por motivos de protección del clima debe saber que la calefacción por hidrógeno no es climáticamente neutra. Normalmente se necesita electricidad o gas para su funcionamiento. Sin embargo, generando electricidad y calor al mismo tiempo se puede ahorrar alrededor del 50 por ciento de las emisiones. Sin embargo, la compra de un calentador de hidrógeno conlleva unos costes elevados.

¿Cuánto cuesta cambiar a un calentador de hidrógeno?

Los costes de un calentador de hidrógeno son significativamente más altos que los de un calentador convencional, escribe Buderus. La pila de combustible en sí cuesta entre 25.000 y 30.000 euros, más una caldera de condensación de gas para cubrir los picos de carga, accesorios e instalación, así como una conexión de gas si aún no está disponible. Los costes totales oscilan entre 29.000 y 44.000 euros. Sin embargo, Buderus cree que la instalación aún podría merecer la pena, especialmente teniendo en cuenta el aumento de los precios de los combustibles fósiles. La estrategia del gobierno federal para eliminar los combustibles fósiles también muestra las desventajas de los sistemas de calefacción tradicionales. Según el fabricante, un calentador de hidrógeno puede ahorrar hasta un 40 por ciento en costes de energía. Además, la electricidad producida al mismo tiempo puede venderse, reinvertirse en la red eléctrica o utilizarse en otros lugares. Esto permite ahorrar costes de electricidad adicionales.

F. Traina / equipo editorial finanzen.net



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