En 2022, el número de casos de gonorrea aumentó un 48 por ciento en comparación con el año anterior. Para la sífilis hubo un aumento del 34 por ciento y para la clamidia un aumento del 16 por ciento. Además, también han aumentado significativamente los casos de linfogranuloma venéreo (LGV), una forma de clamidia, y sífilis congénita, causada por la transmisión maternoinfantil.
Las enfermedades de transmisión sexual como la clamidia, la gonorrea y la sífilis son fáciles de tratar. Si no se hace esto, pueden provocar complicaciones graves. Esto incluye enfermedades inflamatorias pélvicas o dolor crónico. Además, la clamidia y la gonorrea pueden provocar infertilidad, mientras que la sífilis puede provocar problemas neurológicos y cardiovasculares. Una infección por sífilis no tratada durante el embarazo puede provocar problemas en el niño.
El ECDC señala que existe una necesidad urgente de una mayor conciencia sobre la transmisión de las ETS y la necesidad de mejorar la prevención, el acceso a las pruebas y al tratamiento.
La forma más eficaz de prevenir las ETS es tener relaciones sexuales seguras. “Además, promover una comunicación abierta y honesta sobre la salud sexual con las parejas puede ayudar a reducir el riesgo de transmisión de ETS y promover el bienestar general”.
“Las iniciativas de educación y sensibilización son vitales para permitir que las personas tomen decisiones informadas sobre su salud sexual”, afirmó la directora del ECDC, Andrea Ammon. “Promover el uso constante del condón y fomentar un diálogo abierto sobre las ETS puede ayudar a reducir el número de infecciones”.