Después de cuatro visitas de expertos en energía a la casa, se recibieron cuatro certificados de eficiencia energética (EPC) diferentes. Dos expertos en energía otorgaron a la casa que visitaron una etiqueta naranja D, justo encima de la etiqueta E, lo que implicaría la obligación de renovación para los compradores. Un tercer experto asignó una etiqueta C y el cuarto experto asignó una etiqueta B de color verde claro.
Los expertos en energía dieron activamente a la pareja, que se hizo pasar por los propietarios de la casa para el informe, consejos sobre cómo hacer trampa y durante las visitas al lugar hicieron la vista gorda ante diversas deficiencias, como la presencia de una estufa eléctrica en una terraza y una leña. estufa en otro lugar.
Negligencia profesional
La Agencia Flamenca de Energía y Clima (VEKA) está “asombrada” tras ver el informe. “Vemos que la información se retiene y manipula deliberadamente, lo que tiene un impacto importante en el resultado final del EPC. El experto en energía firma una declaración de honor en la que se compromete a actuar de buena fe”, afirmó.
“Tal mala praxis va directamente en contra de esta declaración de honor y del protocolo de inspección, que describe cómo se debe redactar un EPC correcto. Lo que vemos en la imagen no es la forma habitual de trabajar. El EPC es realmente un instrumento fiable”, afirma Lotte Ringoot, portavoz de VEKA.
Este archivo ya estaba en el radar, afirma VEKA. “Hace unas semanas se reportó este caso en nuestro sistema. VEKA llevó a cabo entonces una inspección que demostró que efectivamente se habían cometido errores graves”, afirmó la agencia. Se ha iniciado el procedimiento de ejecución. “La semana pasada se enviaron las primeras cartas de audiencia a los expertos en energía involucrados. Pueden esperar una multa considerable, que puede ascender a 5.000 euros. Un experto en energía se enfrenta a una suspensión”.
Ni un trozo de papel
El ministro flamenco de Energía, Zuhal Demir (N-VA), dijo que no se sorprendió al ver la transmisión. “Pero eso no lo hace menos desagradable”, afirma el ministro.
“La transmisión muestra que algunos expertos en energía tienen una conciencia limitada. Aquí a algunas personas les resulta difícil encontrar seriedad profesional y deontología”, afirma Demir. “El EPC no es un trozo de papel. Es un instrumento importante en la estrategia de renovación y debe redactarse con el cuidado y la precisión necesarios. Los expertos en energía fraudulentos no sólo dañan la confianza en el EPC como documento, sino que también dañan la imagen de toda la profesión”, afirma.
Según el Ministro, en los últimos meses y años también se ha intensificado la lucha contra los expertos en energía deshonestos. Se duplicaron las multas, se aumentó el número de ejecutores, se endurecieron los requisitos para la profesión y se utilizó inteligencia artificial para localizar específicamente a los estafadores. “El aumento de las medidas de aplicación de la ley también está dando resultados. Sólo este año se impusieron 76 multas y se suspendió a 155 expertos en energía. Continuaremos con esos esfuerzos”, dijo Demir.
Cualquiera que tenga dudas sobre la exactitud del EPC debe presentar una reclamación ante VEKA.