Según cifras de Statbel, en 2022 se sacrificaron más de 718.000 pavos en Bélgica. En el matadero de Lendelede se sacrifican cada semana entre 16.000 y 18.000 pavos. Los activistas esperarán a los camiones de reparto con cámaras. “Queremos poder poner cara a estos animales. A través de nuestras fotos, vídeos y transmisiones en vivo garantizamos que la historia de su corta existencia llena de sufrimiento no se pierda”.
“Animal Rights pide al matadero que le dé a un pavo la oportunidad de vivir como gesto navideño”, decía. Luego, el animal sería trasladado a un santuario, un lugar donde los animales reciben atención médica adecuada en un ambiente seguro y natural. La organización de derechos de los animales pide además a la gente que opte por alternativas basadas en plantas en Navidad y que deje el pavo navideño fuera de la mesa.