Del equipo editorial de BZ
El príncipe Andrew (62) esperó mucho tiempo antes de comentar sobre la muerte de la reina Isabel († 96): el día antes de su funeral, era el momento…
“Mamá, tu amor por un hijo, tu compasión, tu cariño, tu confianza siempre serán atesorados”, escribió Andrew en su comunicado.
Y además: “Así como el libro de nuestras experiencias se cierra, otro se abre y siempre te tendré cerca de mi corazón con el más profundo amor y gratitud”.
Las palabras de despedida del príncipe escándalo muestran el aliado que perdió con la muerte de la reina en palacio. Andrew era el favorito de Elizabeth, aunque se dice que violó a Virginia Giuffre (ahora 39) cuando ella tenía 17 en 2001 y era amigo cercano del delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein († 66).
Fue la reina quien le dio a Andrew 2 millones de libras esterlinas (2,5 millones de dólares) después de que acordara un acuerdo extrajudicial de 12 millones de libras esterlinas (15 millones de dólares) con Giuffre a principios de este año. Con gran pesar, tuvo que despojarlo de su estatus de Real Trabajador y Alteza Real para proteger la monarquía.
Recuperar los privilegios parece imposible. El primer intento de Andrew en el verano fracasó, también bajo la presión de su hermano Charles (73), quien ahora está en el trono real. El rey quiere reducir significativamente el número de miembros de la realeza que trabajan.
El príncipe del escándalo podría tener, por tanto, una de sus últimas apariciones públicas el lunes en el funeral de la Reina. Mientras se despide de su madre, el duque de York no podrá usar uniforme militar, a pesar de haber servido en la Guerra de las Malvinas contra Argentina (1982). Este honor está reservado únicamente para los miembros activos de la familia real.
Andrew ni siquiera está invitado a la cena de estado el domingo por la noche. Tampoco su sobrino Harry (38) y su esposa Meghan (41).