André fue encerrado como farsante durante treinta años pero resultó tener cuarenta ‘tumores’ en la cabeza


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André van Sint Feijth con su cuidador Rik Bressers al fondo

André van Sint Feijth con su cuidador Rik Bressers al fondo

MAASTRICH – Ganó peso sin comer mucho, tenía infecciones de la vejiga, dolores nerviosos y muchos síntomas inexplicables, como hematomas y deficiencia de testosterona. Fue solo después de años de búsqueda que André van Sint Feijth descubrió que tiene una rara anomalía genética: KRIT1.



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