Amazon finalmente se tragó su orgullo y contrató a SpaceX para poner en órbita sus satélites Kuiper. Sin embargo, los pasivos entre Blue Origin, la empresa espacial de Jeff Bezos, y la firma…
Amazon finalmente se tragó su orgullo y contrató a SpaceX para poner en órbita sus satélites Kuiper. Sin embargo, las responsabilidades entre Blue Origin, la empresa espacial de Jeff Bezos, y la firma de Elon Musk son pesadas.
Tres lanzamientos de satélites Kuiper hasta mediados de 2025
El Proyecto Kuiper de Amazon, anunciado en 2019, implica llevar Internet satelital a las áreas más remotas del mundo. Se dirigirá a los mismos usuarios que Starlink de SpaceX, que ya tiene más de 5.000 satélites en órbita y apunta a ingresos de 15.000 millones de dólares en 2024.
Amazon lanzó sus dos primeros prototipos en octubre. La compañía tiene contratos con Blue Origin, Arianespace y United Launch Alliance para 83 lanzamientos, pero ninguno de los cohetes involucrados ha volado todavía. Por tanto, el Ariane 6 ha sufrido numerosos aplazamientos y debería realizar su primera prueba en 2024.
Para cumplir los plazos impuestos por la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), es decir, lanzar la mitad de los 3.236 satélites de la constelación antes de 2026, Amazon tuvo que tragarse su orgullo y recurrir a SpaceX. La compañía domina actualmente el mercado de lanzamiento gracias a su cohete reutilizable y ultrafiable Falcon 9. Las tres misiones comenzarán a mediados de 2025.
“ Los lanzamientos adicionales con SpaceX brindan aún más capacidad para respaldar nuestro cronograma de implementación”, dice Amazon. En una publicación en X, Elon Musk se felicita por “lanzar sistemas satelitales competidores sin favorecer »Starlink. Un enfoque que él describe como “ justo y equitativo “. SpaceX recupera muchos contratos debido a los numerosos retrasos de sus competidores. La Unión Europea, por ejemplo, lo contrató para lanzar satélites Galileo.
Compitiendo durante años
Musk y Bezos fundaron cada uno sus empresas espaciales a principios de la década de 2000. SpaceX tenía una gran ventaja sobre Blue Origin. El año que viene, la empresa tiene previsto lanzar por primera vez el New Glenn, un gran cohete que competirá con SpaceX. Las dos compañías entraron en conflicto en el pasado, cuando Blue Origin reprendió a la NASA por seleccionar el cohete Starship de SpaceX como módulo de aterrizaje del programa Artemis.
En agosto, un fondo de pensiones propietario de acciones de Amazon demandó a la empresa y a su junta directiva, alegando que incumplieron sus obligaciones al evitar involucrar a SpaceX en el Proyecto Kuiper. Acusaciones infundadas, según Amazon.