¿El gran culpable? Un remanente del ciclón tropical Merbok que actualmente azota el Mar de Bering, entre Rusia y Alaska. Los meteorólogos sospechan que el ciclón podría provocar crecidas de agua, fuertes rachas de viento (de hasta 145 kilómetros por hora) e inundaciones costeras. Se espera que el nivel del mar permanezca alto en la costa durante unas diez horas, hasta tres metros por encima del nivel normal del mar. «Puede ser la peor tormenta en cinco décadas», dijo el meteorólogo Scott Berg al New York Times.
Además, los preparativos para la tormenta no van bien. Alaska es una vasta área geográfica que alberga pequeñas comunidades de cien personas o menos. Esas comunidades están a kilómetros de distancia y son difíciles de alcanzar. “Por lo tanto, tenemos que esperar y ver antes de desplegar los recursos limitados que tenemos”, dijo Jeremy Zidek, portavoz del Interior.