¿Qué sucedió?
En Bruselas, los líderes europeos finalmente acordaron una estrategia para reducir los precios de la energía para ciudadanos y empresas. Las negociaciones, en ocasiones altamente técnicas, sobre el mercado de la energía se prolongaron durante nueve horas el viernes, algo bastante excepcional para el segundo día de una cumbre europea. Al final, los 27 líderes acordaron la propuesta de que la Comisión, junto con el sector energético, examine una serie de posibles medidas a corto plazo.
¿Qué se ha decidido?
La Comisión Europea va a precios de la gasolina y todavía está trabajando en un sistema para hacerlo posible. En el período previo a la cumbre europea, Bélgica fue uno de los países que más empujó para la introducción de dicho techo y llevó a cabo el forzamiento junto con Italia el viernes por la tarde. Según el Primer Ministro De Croo, el hecho de que se haya mantenido la opción se debe a que la introducción nunca será solo una decisión política, sino que se realizará en consulta con la industria. “Eso fue necesario para convencer a Alemania y Holanda”, dijo en su conferencia de prensa de clausura.
El precio máximo no puede separarse de la segunda decisión importante: la compra conjunta de gasaunque de forma voluntaria. “Hay que ver el mecanismo de precios junto con las compras del grupo. La Comisión solo podrá llevar a cabo buenas negociaciones porque tiene ese precio máximo como un gran garrote”, explicó De Croo.
En concreto, se examinará si estas medidas pueden ayudar a reducir el precio del gas ya combatir la ‘contaminación’ del mercado eléctrico. Allí, el precio mayorista está determinado por el combustible más caro necesario para satisfacer la demanda, actualmente el gas. Durante el mes de mayo, la Comisión presentará propuestas para desvincular los mercados de gas y electricidad.
El presidente estadounidense, Biden, y la presidenta de la Comisión, von der Leyen, también informaron a principios de esta semana que EE. UU. suministrará 15 000 millones de metros cúbicos adicionales de gas licuado (GNL) a la UE este año, lo que aumentará a 50 000 millones de metros cúbicos por año hasta 2030. la cantidad de gas que la UE toma ahora de Rusia cada año.