Rusia dijo que suspendería las inspecciones estadounidenses de sus armas nucleares en virtud de un tratado clave con Estados Unidos debido a las sanciones occidentales por su invasión a Ucrania.
Moscú le dijo a Estados Unidos el lunes que ya no podía participar en las inspecciones bajo el Tratado New Start, el último acuerdo importante de control de armas que queda entre los países, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Culpó a las prohibiciones de que los aviones rusos ingresen al espacio aéreo occidental y a la dificultad de recibir visas para transitar en terceros países, lo que, según dijo, ha dificultado que sus inspectores viajen a los EE. UU. Rusia también afirmó que el creciente número de casos de covid-19 en los EE. UU. significaba que más visitas serían riesgosas para la salud de sus delegados.
Rusia insistió en que estaba comprometida con todas las disposiciones del tratado, al que calificó de “extremadamente importante” para la seguridad mundial. Dijo que las suspensiones eran temporales y que las levantaría “después de que se resuelvan los problemas problemáticos”.
Sin embargo, el desarrollo pone en duda el futuro del tratado menos de una semana después de que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, sugiriera renovarlo antes de su fecha de vencimiento en 2026.
New Start, firmado en 2011, limita la cantidad de ojivas nucleares que pueden usar EE. UU. y Rusia, así como los misiles balísticos intercontinentales, los misiles balísticos lanzados desde submarinos y los bombarderos pesados que se usan para lanzarlos.
Aunque el presidente Vladimir Putin dijo la semana pasada que nunca se debería librar una guerra nuclear, Rusia afirmó que Estados Unidos no estaba negociando de buena fe y lo culpó por retirarse de las conversaciones de estabilidad estratégica después de la invasión de Ucrania.