Como era de esperar, el proveedor estadounidense de calzado y ropa Wolverine World Wide Inc. cerró el ejercicio 2023 con importantes pérdidas de ventas. Sin embargo, la empresa matriz de marcas como Merrell, Saucony, Sweaty Betty y Wolverine pudo reducir significativamente sus pérdidas.
Según un comunicado publicado el miércoles, las ventas del grupo ascendieron el año pasado a 2,24 mil millones de dólares (2,08 mil millones de euros). Esto correspondió a una disminución del 16,5 por ciento (-16,3 por ciento en moneda constante) en comparación con 2022. Ajustados por las acciones de áreas de negocios ahora discontinuadas, como la marca de zapatos Keds, los ingresos se redujeron un 13,1 por ciento (-13,0 por ciento en moneda constante).
Las pérdidas declaradas disminuyen gracias a las medidas de ahorro y a la reducción de los gastos extraordinarios
Todas las marcas importantes del grupo sufrieron pérdidas. Las ventas anuales de Merrell cayeron un 11,6 por ciento (-11,3 por ciento ajustado en moneda) a 675,8 millones de dólares estadounidenses, las de Saucony en un 1,9 por ciento (-1,2 por ciento ajustado en moneda) a 495,8 millones de dólares estadounidenses y las de Wolverine en un 18,7 por ciento (-18,7 por ciento). a tipos de cambio constantes) a 201,2 millones de dólares estadounidenses. La marca de ropa deportiva Sweaty Betty recaudó 203,8 millones de dólares, un 3,6 por ciento menos que el año anterior (-4,5 por ciento ajustado al efecto cambiario).
Debido a menores costos operativos y cargos únicos significativamente menores, la pérdida operativa cayó de $208,4 millones a $68,2 millones. Sin embargo, ajustado por efectos especiales, el beneficio operativo cayó un 61,1 por ciento hasta 67,5 millones de dólares. La pérdida neta atribuible a los accionistas, que fue de 188,3 millones de dólares en 2022, cayó a 39,6 millones de dólares (36,6 millones de euros), y la pérdida diluida por acción reportada se redujo de 2,37 a 0,51 dólares.
La dirección prevé números negros para 2024
El director general, Chris Hufnagel, subrayó que el grupo está aplicando actualmente su actual plan de transformación “a gran velocidad”. “Hemos completado en gran medida la fase de estabilización de nuestra recuperación”, explicó, considerando las numerosas medidas de reducción de costos implementadas en los últimos meses.
Sin embargo, la dirección espera nuevas pérdidas en las ventas para 2024: se prevé una disminución del 12,2 al 14,7 por ciento (ajustado por los efectos cambiarios del -11,8 al -14,3 por ciento) a 1,70 a 1,75 mil millones de dólares. Sin embargo, la empresa espera volver a ser rentable: se espera que las ganancias diluidas por acción alcancen entre 0,43 y 0,63 dólares.