Los fondos de la UE, desde la reordenación de 1.500 millones de programas hasta el bono eléctrico para las familias


De los retrasados ​​programas de los fondos de la UE al bono de la electricidad. Nadef certifica que mil quinientos millones de euros cambian de destino, con una operación que va más allá del mero traslado contable. Porque es una señal más -después de los 550 millones transferidos al Fondo de Garantía de las PYME con un decreto Mimit- de la carrera por salvar recursos europeos que aún no han sido contabilizados antes de fin de año, haciéndolos cubrir medidas con un alto tasa de gasto.

Este es precisamente el caso del bono social para el suministro de electricidad destinado a familias con un ISEE inferior a 15 mil euros. La nota de actualización del documento de economía y finanzas explica que hay 12 programas operativos de la programación europea 2014-2020, de los cuales 5 son nacionales, de los que se extraerá y que «se están tramitando procedimientos formales de modificación». El importe global de los recursos que deben reprogramarse – se especifica luego en el documento elaborado por el Ministerio de Economía – «equivale a más de 1,6 mil millones, de los cuales aproximadamente 1,5 mil millones están destinados a financiar la medida nacional «Bono social de electricidad», para apoyar familias en condiciones de penuria económica». Para transferir estos fondos, el gobierno utiliza la iniciativa Safe, prevista por el reglamento europeo que creó RepowerEu. Los Estados miembros pueden utilizar hasta el 10 % de los fondos estructurales no utilizados del período 2014-2020 para proporcionar apoyo directo a los hogares y pymes vulnerables en materia de costes energéticos.

Regulación europea flexible

La flexibilidad de la regulación permite la retroactividad del gasto elegible y por esta razón el gobierno debería poder utilizar recursos de la UE para reemplazar la cobertura nacional, liberando una cantidad correspondiente para futuras intervenciones.

La reprogramación afecta a algunos de los programas en los que los ministerios y regiones han registrado los mayores retrasos. En algunos casos, además de los fondos estructurales del FEDER y del FSE, los programas también se beneficiaron del fondo adicional React-Eu que Bruselas había lanzado para hacer frente a la emergencia del Covid-19.

Saber más

La investigación comenzó hace varios meses. De hecho, el primer plan de trabajo fue discutido durante la reunión anual de revisión de los Programas 2014-2020 con representantes de la Comisión de la UE y de las autoridades de gestión italianas (véase Il Sole 24 Ore del 23 de abril). La primera estimación, de 750 millones a pagar por el bono eléctrico, fue ampliamente superada hasta duplicarse, según certifica el Nadef.



ttn-es-11