La acusación de Amazon por prácticas anticompetitivas por parte de la Comisión Federal de Comercio (FTC) podría producirse ya en septiembre. La agencia federal ha estado investigando las prácticas de la empresa durante cuatro años. …
La acusación de Amazon por prácticas anticompetitivas por parte de la Comisión Federal de Comercio (FTC) podría producirse ya en septiembre. La agencia federal ha estado investigando las prácticas de la empresa durante cuatro años.
El cuarto caso del año
A principios de agosto, los comisionados de la FTC escucharon a representantes de Amazon, uno de los últimos pasos antes de posibles demandas. Evidentemente, esto último no convenció a los responsables de la toma de decisiones, que deberían concluir sus cuatro años de investigación con una acusación por abuso de posición dominante.
El caso tendrá como objetivo el mercado del gigante del comercio electrónico. Varias de sus prácticas deberían ser denunciadas, como la utilización de datos de sus vendedores externos para decidir qué productos promocionar, la preferencia otorgada a sus productos en detrimento de los vendedores independientes o la obligación de los vendedores Prime de utilizar la logística y servicios de entrega.
Este será el cuarto caso entre la FTC y Amazon este año. El pasado mes de junio, la comisión ya presentó una denuncia contra la empresa por haber » engañado » Y » trampa consumidores con su oferta de suscripción Prime. Días antes, la compañía acordó pagar más de 30 millones de dólares al regulador para poner fin a las demandas que la acusaban de violaciones de la privacidad en sus dispositivos Alexa y Ring.
Sin embargo, esta nueva denuncia debería tener una escala mucho mayor que las anteriores.
Las autoridades americanas son más firmes
Lina Khan, presidenta de la FTC nombrada por Joe Biden en 2020, se opone abiertamente a Amazon. En un artículo académico de amplia circulación, detalló cómo Amazon ganó demasiado poder de mercado. Según ella, la legislación antimonopolio no ha logrado limitar esta facultad, debido a que los textos son demasiado obsoletos. La empresa intentó impedir su ascenso a la presidencia de la FTC, creyendo que estaría sesgada en sus decisiones.
Además de Amazon, Google y Meta también son objeto de demandas por parte de las autoridades estadounidenses. Desde principios de la década, el gobierno decidió alzar la voz ante las prácticas consideradas monopólicas por los gigantes tecnológicos del país.