El principio ya se había acordado la primavera pasada, pero el momento de la medida no estaba claro. La Mesa de la Cámara, órgano administrativo en el que están representados los distintos grupos políticos, ha decidido ahora que la restricción entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2024. Se agregarán las asignaciones de vacaciones al cálculo y habrá una colaboración con el servicio federal de pensiones para intercambiar y verificar información, dijo Tillieux.
A principios de marzo se filtró que varios expresidentes del parlamento y altos funcionarios podrían cobrar bonos de pensión ilegales durante años por encima del techo de Wijninckx, que fija el límite en 7.800 euros brutos al mes. Un poco más tarde resultó que los parlamentarios ordinarios también podían superar ese tope combinando la pensión de la Cámara con la de otras actividades. Por lo tanto, esos exdiputados verán reducida su pensión a partir del próximo año.