El organizador Jory Bosch indica cuáles son esos acuerdos: “Por ejemplo, estamos moviendo el sitio un poco más hacia atrás. En los próximos años buscaremos otras ubicaciones, en las afueras de Dalen. Hasta 2026, al menos podemos trabajar en este lugar organizando nuestro festival. Además, no se permiten más de 5.000 visitantes por día. En esta edición, el evento apunta a cuatro mil visitantes por día. “El domingo es gratis, así que no sabemos cuántas personas podemos recibir ese día”, dice Bosch.
Dos objetores no estaban en casa cuando llegó RTV Drenthe. Otro objetor se negó a comentar.
Roelof Boer y Alwin Eijsink también son vecinos cercanos del festival. “Mucho ya está desapareciendo del pueblo”, dice Eijsink. “Deberías estar un poco orgulloso de esto. Es solo un fin de semana al año”. Su vecino luego agrega: “La organización también nos mantiene muy bien informados”.
Así que podemos mirar hacia adelante nuevamente: “La construcción va muy bien”, dice con orgullo Bosch. “Tenemos cuatro escenarios este año, con para todos los gustos. Aquí tocan muchas bandas a la derecha, detrás de ellas entre los contenedores hay pisotones de hardstyle”, resume. “Están por suceder muchas cosas”.
“En realidad, te pasas todo el año organizando esto y en estas últimas semanas estamos construyendo cosas con 225 voluntarios. Eso es genial”, dice sonriente. “Realmente es un festival para todos: jóvenes y mayores y no solo para Dalen, sino para toda la región. Muchas personas de Coevorden, Emmen y Hardenberg también caminan aquí”.
Pearl Village Festival y Weijdepop en Reindersdijk en Dalen comienzan mañana y duran hasta el domingo.