Prima
Lo mejor de De Telegraaf
Un socio debería haber contado hasta diez en lugar de regañar a un nuevo empleado. Foto para ilustración.
Ⓒ imágenes falsas
Ámsterdam – Un insulto a un nuevo empleado le ha costado muy caro a un blanqueador de dientes en Zoetermeer. Tras una regañina de uno de los dueños a la mujer, con términos como ‘tonta de cerebro’ y ‘vaca estúpida’, la empresa debe pagar a la mujer nada menos que once salarios mensuales, ha dictaminado el tribunal de La Haya.