Un trabajo para volver a la normalidad después de la cárcel. Rescate que pasa por la formación y la educación, así como por el compromiso con las actividades sociales. Desde el mundo del voluntariado y las instituciones, se alternan y multiplican iniciativas encaminadas a dar una nueva oportunidad a quienes se han equivocado intentando activar el puente que va de la cárcel a las empresas y permitirles iniciar un camino de reinserción social. En este contexto, la iniciativa que tiene como objetivo la recogida de residuos abandonados se convierte también en una oportunidad y una oportunidad irrenunciable.
la segunda oportunidad
Es el espíritu que anima la iniciativa puesta en marcha (para el domingo 25) por las asociaciones «Seconda chance», una asociación del tercer sector, y «Plastic Free», comprometida con la lucha contra la contaminación plástica, en Génova, Reggio Emilia, Florencia, Secondigliano y Cagliari.
objetivo de remediación
Fin de la iniciativa: limpieza de zonas degradadas mediante la recogida de plásticos, residuos y colillas. Todo dentro de un programa que aúna inclusión y reeducación, respeto por el medio ambiente y la ley. Espíritu que en el pasado ya ha visto participar a más de 50 presos en las jornadas ecológicas que tuvieron lugar en Bolonia, Priverno (Latina) y Palmi (Reggio Calabria).
Iniciativas pasadas
La puesta en marcha por las dos asociaciones es solo una de las iniciativas que se están llevando a cabo para intentar favorecer la reinserción de los presos en la actividad laboral. No es casualidad que, desde hace un tiempo, las empresas que se ocupan de las TIC suscriban protocolos para la inclusión de los detenidos en los programas de trabajo, como han hecho Anci y Ance.
Una dotación de 13 millones
Sin embargo, esto no es todo, porque también hay otras medidas e iniciativas en camino. El comunicado del Ministerio de Justicia del viernes 23 dio luz verde a un decreto por el que se destinan 13 millones de euros para la reinserción de los presos «y para las actividades organizadas en los centros penitenciarios destinadas a ampliar la formación laboral». El decreto prevé destinar 5 millones de euros a la reinserción de presos y condenados, también mediante la activación de cursos de inserción laboral y formación profesional, para la atención y asistencia sanitaria y psiquiátrica, así como para la recuperación de drogodependientes o consumidores habituales de estupefacientes , sustancias psicotrópicas o alcohólicas.