El comando de la fuerza aérea ha enviado a casa al personal de la ubicación en Dongen. Debido a las pésimas condiciones de trabajo, la gerencia ya no se considera responsable de que las personas trabajen allí. Ron Segers, del sindicato militar AFMP, saluda el cierre: “Es una locura cómo la gente tiene que trabajar allí”.
El escuadrón 982 está ubicado en el complejo en Kanaalstraat. Las 200 personas que trabajan aquí se ocupan de los sistemas tecnológicos y el apoyo a la misión.
Según la gerencia, las condiciones de trabajo ya no son aceptables en el complejo obsoleto. La suspensión del trabajo debería prevenir accidentes. Los edificios y las instalaciones en el lugar sufren demasiado mantenimiento atrasado y defectos. Según un portavoz, cada vez se solucionaban más los problemas. “Si las losas del piso estaban torcidas, las cerrábamos. Si había una tormenta, parábamos de trabajar porque los pararrayos no funcionaban y el sótano se llenaba de agua cuando llovía”.
La dirección de la fuerza aérea quiere deshacerse de todos los parches, porque aún queda trabajo por hacer en Dongen hasta al menos 2026. La situación ahora se está trazando cuidadosamente. Esto se hace para ver qué medidas se necesitan para mejorar algunas de las instalaciones deterioradas. Por ejemplo, la fuerza aérea quiere excluir situaciones inseguras tanto como sea posible para que el escuadrón pueda reanudar su trabajo.
El complejo también alberga edificios de otras unidades de defensa como el ejército y el comando de apoyo a la defensa. Aunque seguirán abiertos. Todavía no está claro cuánto tiempo el personal de la Fuerza Aérea no podrá regresar al trabajo. Esto quedará claro en un futuro próximo cuando se elabore un plan de acción.
Cambiar de casa
El escuadrón 982 forma parte del Centro de Logística Woensdrecht de la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos y ha sido designado para trasladarse allí durante algún tiempo. Ese movimiento se ha pospuesto varias veces debido a la escasez financiera en el Ministerio de Defensa. Ahora el movimiento también dependerá de los permisos y las emisiones de nitrógeno.
Ron Segers del sindicato militar AFMP da la bienvenida al cierre temporal. “Es una locura cómo la gente tiene que trabajar allí. El moho está en las paredes. Por eso me alegro de que el comandante defienda a su estado mayor y haya cerrado temporalmente la ubicación. El comando de la fuerza aérea ahora tendrá que tomar medidas”.