“Los editoriales dominicales de Sergio Fabbrini representan una cita fija para todo aquel interesado en comprender los cambios que se están produciendo en el mundo y los desafíos a los que están llamadas Europa e Italia. Los artículos recogidos en este volumen nos recuerdan que la democracia liberal representa un bien preciado, que debemos seguir defendiendo y fortaleciendo”.
Paolo Gentiloni, comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios
La democracia sigue siendo un tema muy frágil, más aún hoy cuando el equilibrio del mundo se ve severamente puesto a prueba por la pandemia de la Covid-19 y, en las últimas horas, por el conflicto ruso-ucraniano. Para comprender mejor las tensiones producidas en las democracias occidentales por la crisis de la pandemia y los cambios políticos acelerados por ella, Il Sole 24 Ore propone, en los quioscos durante un mes a partir del 1 de marzo y en las librerías a partir del 3 de marzo, el volumen “Democracias bajo tensión. Europa, Italia, América” de Sergio Fabbrini, Catedrático de Ciencia Política y Relaciones Internacionales y Director del Departamento de Ciencia Política de LUISS Guido Carli, donde fundó y dirigió la Escuela de Gobierno de 2010 a 2018. El volumen recoge las editoriales Sunday de Sergio Fabbrini publicado en Il Sole 24 Ore desde agosto de 2020 hasta enero de 2022.
Las democracias occidentales -según el autor- en este último período han sido sometidas a pruebas de tensión reales, concretas y no simuladas, que han puesto de manifiesto su resiliencia pero también su disfuncionalidad. El volumen parte de la Unión Europea, describiendo y analizando su funcionamiento frente a la crisis de la pandemia, divisiones entre estados miembros, desafíos y presiones externas. La UE ha logrado aprobar un programa de importancia histórica (Next Generation EU, NG-EU), sentando así las condiciones para crear economías nacionales ambientalmente sostenibles, digitalmente avanzadas y socialmente inclusivas. Sin embargo, este resultado no resolvió los problemas estructurales de los procesos de toma de decisiones disfuncionales, así como de las élites políticas divididas sobre el propósito del proceso de integración europea. El liderazgo de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, que jugó un papel importante en la promoción de NG-EU, no puede ser suficiente para dar por superada la prueba de resistencia europea. El volumen pasa luego a Italia, reconstruyendo los motivos que llevaron a la crisis del gobierno del Conte I y al nacimiento del gobierno de Draghi. Con esto último, Italia logró ponerse al día con los retrasos en la campaña de vacunación y en la elaboración del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia (Pnrr), pero no resolvió los problemas estructurales de instituciones públicas ineficientes, de una élite política sesgada y de una determinada representación económica y social. La autoridad de Mario Draghi no puede ser suficiente para dar por superada la prueba de resistencia italiana. Finalmente, el volumen describe y analiza el funcionamiento de la democracia estadounidense en las condiciones de una crisis sanitaria y constitucional sin precedentes.
Estados Unidos ha logrado contener los desafíos del autoritarismo trumpiano al traer a la Casa Blanca a un líder demócrata y multilateralista como Joe Biden. Sin embargo, incluso en este caso, el resultado de las elecciones de noviembre de 2020 no resolvió la crisis de la democracia estadounidense, como lo demuestra el asalto al Congreso en enero siguiente, el aumento de la polarización entre los dos partidos principales, la toma de decisiones recurrente parálisis del sistema de gobierno separado, a partir de los conflictos entre el centro federal y los estados federados que han vuelto a frenar la campaña de vacunación. La llegada de Joe Biden a la Casa Blanca no puede ser suficiente para dar por superada la prueba de resistencia estadounidense. Por lo tanto, no es obvio que las democracias occidentales, que se encuentran entre la resiliencia y la fragilidad, puedan pasar esta prueba.
En la introducción, Paolo Gentiloni, Comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios especifica: “¿Misión cumplida, entonces? Para nada. El coronavirus, en su última evolución, sigue ejerciendo presión sobre nuestros sistemas de salud, aunque en menor medida que en los primeros compases de la pandemia. Este y otros factores de riesgo, vinculados en particular a la fortaleza de las cadenas de suministro globales, la evolución de la inflación y las tensiones geopolíticas, seguirán lastrando la recuperación. En los próximos meses tendremos que monitorear estos riesgos y permanecer listos para intervenir si es necesario”.