Mañana el equipo jugará el último partido de la temporada ante su afición, pocas horas después de la junta de accionistas y de la marcha de protesta de los aficionados que llegarán desde la sede del club a los Ferraris. Mientras tanto, el presidente del PSG, Nasser Al Khelaifi, aparece…
Ahora o nunca. El tiempo se agota, probablemente el futuro de la Sampdoria habrá que perfilarlo el próximo lunes, cuando se haya fijado la segunda convocatoria de la junta de accionistas convocada para recapitalizar un club al borde del abismo. La primera reunión de los integrantes está prevista para mañana por la tarde, en la sede del Corte Lambruschini, cinco horas antes del último partido en casa del equipo de Stankovic, en la que será de todos modos la peor temporada de su historia, con un equipo que será refundado, teniendo en cuenta que el mercado de fichajes de enero trajo principalmente jugadores cedidos al Genoa, que dejarán el club.
EL OTRO PARTIDO
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Pero hay un reto más importante que se está jugando y el del futuro de la empresa. Dos realidades trabajan para evitar el colapso: la primera está ligada al financiero Alessandro Barnaba, a través del fondo Merlyn Partners, que desde hace meses remodela su oferta para garantizar un futuro a la Samp, mediante una recapitalización inicial de unos 35 millones para asegurar el negocio. continuidad y financiación adicional para volver de la Serie B con una plantilla adecuada. Una operación que correspondería, al menos sobre el papel, al accionista de referencia. Esta inyección de dinero fresco permitiría el pago de los sueldos de los jugadores inscritos para el próximo martes (se necesitan unos doce millones para los sueldos del primer trimestre de 2023, de lo contrario se desencadenará una sanción de cuatro puntos en la próxima temporada) y para pagar la cuota vencida del Irpef. En este caso, para no saltarte la cuota y tener que pagar la totalidad del importe en un solo pago. Barnaba ya es accionista minoritario del club, y eso le permitiría “salvar” a la Sampdoria sin tener que lidiar con los actuales propietarios. El que, como se sabe, ha blindado a la Sampdoria en un fideicomiso. Quien lo quiera deberá pagar primero 35 millones para “liberarlo”, teniendo en cuenta que el dinero aquí es utilizado por los concordatos romanos de la propiedad actual. Una historia intrincada, pero cuyo final aún está cerca.
LA NUEVA ENTRADA
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La segunda realidad, sin embargo, lleva al patrón del Leeds, Andrea Radrizzani (junto al compañero Matteo Manfredi), que también ha implicado en las últimas horas a Nasser Al Khelaifi, presidente del PSG y timonel del fondo deportivo de Qatar. Lo que, a su vez, podría garantizar un apoyo financiero minoritario en el acuerdo de Sampdoria. Sin embargo, primero hay que resolver muchas cuestiones, empezando por la necesidad de llegar a un acuerdo con los bancos acreedores (la exposición financiera de la Sampdoria es espeluznante), así como con aquellos acreedores a los que se les ha ofrecido un plan de pago a plazos sobre cifras insignificantes en comparación con lo que cada uno tendría derecho. El riesgo es que, en caso de negativa, la Sampdoria entre en default, arrastrando a todos al abismo. Muchos, sin embargo, muy arraigados en la zona, incluso con grandes créditos, no pretenden aceptar por el simple hecho de que decir que sí equivaldría a decretar la quiebra de sus negocios. Seguimos negociando.
EMPLEADOS Y NUEVOS PLAZOS
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Sin embargo, poco se habla de la situación de los aproximadamente medio centenar de empleados de la empresa, que el pasado mes de diciembre cobraron su último mes de salario y ahora entran en su quinto mes sin sueldo. La esperanza es que una conclusión positiva de una de las dos negociaciones también les dé un merecido respiro, los más penalizados por esta situación. Dejando de lado los salarios y el IRPF, nuevos plazos se ciernen sobre la Sampdoria. El próximo 6 de junio expirarán las medidas de protección garantizadas por la salida negociada de la crisis, lo que dará luz verde a cualquier acción judicial por parte de todos los acreedores de la empresa. Y, de nuevo, el día 20 del próximo mes, la Sampdoria presentará las múltiples garantías económicas necesarias para la inscripción en el próximo campeonato. Un importante compromiso económico, que sólo un nuevo accionista (o propietario) puede garantizar.
BOD Y AFICIONADOS
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Desde finales de diciembre de 2021 hasta hoy, en un mar cada vez más agitado, siempre están el presidente Lanna y sus tres compañeros de aventuras en la Junta Directiva (el vicepresidente Romei y los directores Bosco y Panconi). Quienes ahora esperan, después de largas y agotadoras discusiones a todos los niveles, poder ver el final de un camino tan tortuoso y problemático. Los que, como ellos, nunca han perdido la esperanza son los aficionados, a pesar de los muchos fracasos del equipo y las incertidumbres corporativas. Una presencia constante, en casa y fuera, que también se volverá a sentir mañana por la tarde en las calles de la ciudad. Una gran procesión que involucrará a las distintas almas del público Dorian partirá de la sede de Corte Lambruschini para llegar a los Ferrari justo antes del partido contra Sassuolo. Con un solo mensaje en mente: Samp no puede ni debe desaparecer.
25 de mayo – 13.44 h
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