Hoorn se llena regularmente de grafitis. Una espina en el costado de muchos y el municipio no sabe cómo abordar esto. Es casi imposible imponer sanciones y los costos de limpieza son considerables. Mientras tanto, el municipio espera cambiar el rumbo con una nueva política.
Así fue la semana pasada parque juliana. Bancos, botes de basura, marquesinas y señales de tráfico están llenos de grafitis. Varios textos y las letras ‘KR’ son claramente visibles.
En enero pasado, el municipio hizo una suma de la cantidad de etiquetas de graffiti. Eso fue entonces alrededor de 5,000 etiquetas de graffiti pequeñas y 100 más grandes. Costo de quitarlo tal 800.000 euros. “Toda esta destrucción no solo causa irritación, sino que los costos también son considerables. El descontento social y la resistencia que genera son preocupantes”, dijo el alcalde Jan Nieuwenburg en una carta al consejo.
Medidas de poco efecto
El municipio está tratando de hacer todo lo posible para castigar a los graffiteros. No menos de siete personas presuntamente involucradas en el grafiti han recibido una carta en los últimos dos años. En la mayoría de los casos, se han emitido advertencias. Pero dos rociadores de graffiti también han sido atrapados en el acto. La próxima vez tienen que desembolsar 5.000 euros por infracción.
“Sin embargo, las multas coercitivas parecen tener poco efecto en los grafiteros”
“Sin embargo, las multas coercitivas parecen tener poco efecto sobre los graffiteros. La destrucción de grafitis continúa”, continúa el alcalde de Hoorn.
En última instancia, es difícil procesar y llevar ante la justicia a los rociadores de graffiti. Debe haber pruebas claras de que el grafiti en cuestión también ha rociado algo. Por ejemplo, el municipio finalmente no pudo cobrar dos multas coercitivas. “El sospechoso fue absuelto por falta de pruebas”, dice Nieuwenburg.
Mire a continuación el informe de Horinees Jason, quien colgó las cámaras él mismo hace dos años, porque ya terminó con el graffiti (el texto continúa debajo del video):
Nueva política en proceso
El municipio de Hoorn está claramente en problemas con la molestia del graffiti. “Seguimos comprometidos a abordar la destrucción causada por el graffiti. El enfoque tiene una alta prioridad para la policía y nuestros supervisores. Si nuestra propiedad es destruida, también informamos a la policía como estándar”, dice el alcalde Nieuwenburg.
Para combatir mejor las molestias causadas por los grafitis, el municipio está preparando un nuevo plan de políticas, que se centra en cómo abordarlo. “También tenemos en cuenta si el grafiti es ofensivo, en qué objetos se ha colocado (objetos privados o municipales) y en qué plazo se eliminarán los grafitis”.
Eliminar juntos
Hace unas semanas, el ayuntamiento de Hoorn propuso al ayuntamiento retirar las pintadas con un nutrido grupo el sábado 27 de mayo. Esta iniciativa cuenta con el apoyo del alcalde. Según Nieuwenburg, esto envía una señal importante a los residentes sobre lo importante que es para ellos.
Nieuwenburg: “También seguimos involucrando a nuestros residentes y les pedimos que denuncien situaciones sospechosas de inmediato a la policía o al municipio. También seguimos pidiendo a los residentes que hagan videos sobre la base de los cuales se puede deducir una situación de flagrante delito. “