El columnista Jan Segers recuerda el 1 de mayo. “Las socialistas, las que ya el 30 de abril preparamos nuestra lencería roja para la procesión del día siguiente, las mujeres y los hombres de pan rojo o sin pan, fuimos todo ojos y oídos ese día para el discurso de nuestro presidente. Llámenos anticuados, pero pensamos que era brillante, nuestro Gran Monitor”.
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