NU.nl profundiza regularmente en una pregunta relacionada con el clima. Esta vez echamos un vistazo más de cerca al término ‘climáticamente neutral’. Las empresas y los gobiernos utilizan la palabra y también la encontramos cada vez más en las etiquetas de bienes y servicios. ¿Pero qué significa exactamente?
Nederland streeft ernaar om in 2050 klimaatneutraal zijn. We kunnen ervoor kiezen om onze pakketjes op deze manier thuis te laten bezorgen. En we zien het woord verschijnen op kledingstukken, vliegtickets en nieuwbouwhuizen.
Het zijn drie voorbeelden van ‘klimaatneutraal’ in een andere context. Het is dan ook niet gek dat veel mensen er weinig van begrijpen. Toezichthouder ACM deed er vorig jaar onderzoek naar en ontdekte dat veel mensen termen als CO2-neutraal onduidelijk vinden. Zulke claims kunnen misleidend en soms zelfs onwaar zijn, staat in recente stukken van de Europese Commissie.
Maar wat betekent klimaatneutraal eigenlijk? Het klimaatpanel van de Verenigde Naties, het IPCC, definieert klimaatneutraal als een situatie waarin mensen geen negatieve invloed hebben op het klimaat. Het betekent dus dat de broeikasgassen die door mensen worden uitgestoten ergens anders worden gecompenseerd. Het houdt níét in dat er helemaal geen CO2 wordt uitgestoten of dat er geen schade aan het klimaat wordt aangericht.
Klimaatneutraal is overigens niet helemaal hetzelfde als CO2-neutraal. Er bestaan namelijk verschillende soorten broeikasgassen. Zo stoten vliegtuigen meerdere gassen uit, waardoor de impact op het klimaat groter is dan alleen CO2-uitstoot.
Compensar con árboles, paneles solares o cocinas
Al compensar las emisiones, las empresas pueden afirmar que son climáticamente neutrales. Vemos esta compensación en varias formas. Por ejemplo, hay empresas que plantan árboles o protegen bosques en algún lugar del mundo, otras invierten en energía solar y eólica y algunas empresas invierten dinero en proyectos locales de sostenibilidad.
Un ejemplo bien conocido de esto es invertir en aparatos de cocina en India y ciertos países africanos. En colaboración con organizaciones locales, se está invirtiendo dinero en estufas, con la idea de que se queme menos madera y, por lo tanto, se talen menos árboles.
¿Reducir las emisiones o ‘comprar’?
Hay críticas a este tipo de compensación desde varios ángulos. Los críticos hablan de lavado verde – ocultar su huella ecológica mediante la compra de emisiones. Además, los árboles tardan años en extraer CO2 del aire y el efecto climático directo de los proyectos sostenibles no siempre se puede medir muy bien.
El experto en sostenibilidad Marc Herberigs entiende esa crítica. Aconseja a las empresas sobre cómo convertirse en climáticamente neutrales. «En sí misma, la compensación no es mala: puede tener un impacto y hacernos más conscientes».
Pero según Herberigs, se necesita más. «Compensar solo no tiene sentido; es esencial volverse ecológico», dice. «Las empresas pueden hacer mucho para ser más sostenibles y reducir sus emisiones. Piense en el transporte eléctrico, el diseño de los edificios, use menos energía y compre paneles solares».
No consumir sigue siendo la forma de consumir más neutra para el clima.
Para limitar el calentamiento global a 1,5 grados, tendremos que reducir activamente nuestras emisiones, dice Sanne Akerboom. Es investigadora de políticas y clima en la Universidad de Utrecht. «Los combustibles fósiles deben ser reemplazados por fuentes de energía sostenibles. Las emisiones que quedan pueden compensarse, por ejemplo, plantando árboles».
Tanto Herberigs como Akerboom creen que es importante que las empresas sean transparentes con los consumidores sobre sus emisiones reales de productos o servicios. Actualmente hay Europa legislación en los trabajos que impondrán regulaciones más estrictas a las empresas y protegerán más a los consumidores contra afirmaciones ecológicas potencialmente engañosas.
Akerboom: «Mientras tanto, no consumir sigue siendo la forma de consumir más neutral para el clima».