Mathieu van der Poel no cree que haya un máximo favorito para la París-Roubaix. El ganador de la Milán-San Remo no se ve a sí mismo como el máximo contendiente y tampoco su rival Wout van Aert.
El padre de Van der Poel, Adrie, dijo la semana pasada después del Tour de Flandes que ve a Van Aert como el máximo favorito para ‘Roubaix’. El propio Van Aert ya se rió y Van der Poel, de 28 años, tampoco puede estar de acuerdo con eso.
“No creo que haya un gran favorito. Uno puede haber sido un poco mejor que el otro en los últimos tiempos, pero esta es una carrera completamente diferente. Creo que esta carrera es un poco mejor para Wout que el Tour de Flandes”. pero no es el máximo favorito absoluto”, dice Van der Poel el viernes.
“En ‘Roubaix’ siempre hay muchos contendientes. Filippo Ganna, Stefan Küng, Mads Pedersen, Kasper Asgreen e Yves Lampaert son nombres en los que pienso de inmediato, pero hay más”.
“Las piernas se sienten bien”
Van der Poel aprovechó el viernes para explorar el recorrido París-Roubaix. El corredor de Alpecin-Deceuninck se siente lo suficientemente bien como para competir el domingo por el tercer monumento de la temporada.
“Las piernas se sienten bien. Me había recuperado bastante bien del Tour de Flandes y en Scheldeprijs me sentí bastante bien. Ayer no toqué la bicicleta y hoy hice un poco más de reconocimiento”, dice.
El holandés ha dejado atrás en gran medida sus problemas de espalda y elige sus carreras esta temporada. “En consulta con el equipo, corro menos carreras. Entonces es más fácil para mí ir al hoyo”.
La París-Roubaix la ganó Dylan van Baarle el año pasado. El holandés, que lleva desde este año al volante del Jumbo-Visma, se ha recuperado de una lesión a tiempo para volver a participar en ‘De Hel van het Noorden’.