Para las personas cuyo sistema inmunitario no funciona, un microbio diminuto puede ser mortal. Tienen que pasar semanas, meses o incluso la vida en aislamiento. Una cápsula protectora en movimiento debería permitirles estar cerca de otras personas y volver a ser móviles.
Moby es el nombre de la pelota de plástico sobre ruedas. El prototipo fue presentado el jueves por la start-up berlinesa Sphaira.
«Cuando vi las imágenes de Bérgamo en marzo de 2020 al comienzo de la primera ola de corona, me sorprendió. La gente no podía despedirse de sus familiares moribundos», dice la fundadora Janis Münch (40). «Me pregunté: ¿Cómo puede ser eso en nuestro mundo de progreso?»
En 18 meses, Münch desarrolló la silla de ruedas de alta tecnología con cúpula, vista de 360 grados e intercomunicador.
► Los filtros especiales hacen que el aire interior esté libre de virus y partículas.
► La sobrepresión evita que los patógenos entren desde el exterior.
► La presión negativa puede proteger al mundo exterior de la infección por una persona enferma en el interior.
► El usuario puede tocar cosas a través de dos orificios con guantes. Controla el vehículo con un joystick (6 km/h).
Primero, Moby se probará en la sala de cáncer infantil de la Clínica Virchow de Charité.
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«Muchos de nuestros pacientes necesitan un trasplante de células madre», dice la directora de la clínica, la profesora Angelika Eggert. “Tienen que permanecer en una habitación con aire filtrado durante las semanas siguientes. Algunos se deprimen”. En la cápsula rodante, podían salir de su aislamiento, recibir visitas, un impulso en la motivación.
Moby debería estar listo para la producción en serie en un año y medio. Entonces también podría usarse en unidades de cuidados intensivos, centros de rehabilitación o residencias de ancianos.
