“Las salidas de clientes, en niveles sin precedentes a principios de octubre, no se han revertido este mes, sino que se han estabilizado en niveles mucho más bajos”, dijo el informe anual de Credit Suisse. En noviembre, los clientes retiraron el equivalente a 87.000 millones de euros de sus cuentas en la oficina de gestión de activos del banco. Eso sucedió después de una avalancha de mensajes en las redes sociales sobre la salud financiera del banco.
El banco suizo sufrió su mayor pérdida anual desde la crisis financiera de 2008 el año pasado, se anunció el mes pasado. El segundo banco más grande de Suiza está luchando con altos costos de reorganización y una gran salida de capital, entre otras cosas. Credit Suisse también tuvo que lidiar con una serie de costosos escándalos. La pérdida neta ascendió a 7.300 millones de francos suizos, equivalente a 7.400 millones de euros.
El grupo perdió miles de millones debido a escándalos que también dañaron seriamente su reputación. Por ejemplo, Credit Suisse hizo negocios con el fondo de inversión Archegos y la compañía financiera Greensill, que colapsó debido a un comportamiento arriesgado. Credit Suisse espera volver a la rentabilidad en 2024.