Decenas de miles de israelíes en las calles por octava semana contra la reforma del poder judicial

El nuevo gobierno de derecha liderado por Benjamin Netanyahu quiere dar al parlamento el poder de anular las decisiones de la Corte Suprema. El gobierno también quiere que sea posible cambiar la composición de la junta que nombra a los jueces. El partido opositor llama a esta ley un ataque a la democracia.

Netanyahu está actualmente bajo investigación por corrupción. Los opositores a la nueva ley sospechan, por tanto, que el presidente intentará evitar su condena de esta forma.

Netanyahu, a su vez, lo niega. Según él, la nueva ley fortalecerá la democracia israelí e impulsará la economía. Desestima a los manifestantes como “anarquistas”. Además, Netanyahu niega que hubiera llamado a sus simpatizantes a recurrir a la violencia contra los manifestantes de izquierda.

El ex primer ministro israelí Ehud Barak advirtió sobre un golpe inminente en un discurso en una de las protestas. “Si la controvertida reforma sigue adelante, debemos pasar a la resistencia noviolenta”, dijo.



ttn-es-3