«Las entregas no se reanudarán hasta que la FAA esté convencida de que el problema se ha resuelto», dijo la agencia en un mensaje enviado a la agencia de noticias AFP. La autoridad enfatizó que está trabajando con el fabricante de aeronaves de EE. UU. para determinar qué acciones pueden ser necesarias para las aeronaves entregadas recientemente.
En los últimos dos años, las entregas del 787 Dreamliner se han suspendido varias veces debido a problemas técnicos y defectos. La seguridad de los aviones de Boeing es una gran preocupación para la Autoridad de Aviación de los Estados Unidos (FAA), especialmente después de dos accidentes fatales que involucraron aviones 737 MAX en 2018 y 2019.