El gobierno alemán ha dado luz verde a Infineon para que comience a construir su planta de semiconductores en Dresde, en el este de Alemania. La obra costará cerca de cinco mil millones de euros a la spin-off de Samsung, que espera dar un paso más gracias a su nueva infraestructura.
Alemania, sede de fábricas de semiconductores
Está hecho. Después de varias semanas de diálogo con Berlín, el consejo de supervisión y el consejo de administración de Infineon Technologies validaron el proyecto para el sitio de producción de semiconductores de Dresde. Anunciado en noviembre de 2022, había que esperar el apoyo del Estado alemán para formalizar el lanzamiento del proyecto. Se espera que el gobierno alemán ayude a la empresa con mil millones de euros, o una quinta parte de la cantidad necesaria para construir la planta.
En menos de dos años, Alemania ha subvencionado públicamente tres proyectos similares. El primero es el de la fábrica de Bosch, también ubicada en Dresde desde junio de 2021. Los otros dos proyectos conciernen a empresas estadounidenses. En primer lugar Wolfspeed, fabricante de iluminación LED, que construirá con el proveedor alemán de automoción ZF, una fábrica de chips de carburo de silicio, en Saarland. El segundo sitio de producción pertenecerá al gigante tecnológico Intel y estará ubicado cerca de Magdeburg. Entre los otros proyectos en discusión, el de TSMC que también quiere montar una fábrica en Dresden.
Fábricas ubicadas en Europa serán menos dependientes de la producción asiática
Antes de que pueda comenzar oficialmente la construcción de la planta, Infineon está esperando la aprobación de la Comisión Europea en virtud de la Ley Europea de Chips. En total, se liberarán 45.000 millones de euros para apoyar la industria de los semiconductores en Europa. Con tal cantidad, la UE se suma a la cantidad asignada por Estados Unidos con su propia Ley de Chips y que asciende a 52 mil millones de dólares. La empresa alemana sigue a la espera de saber si la institución europea le concederá ayudas gracias a este gran plan.
Ejemplo de prueba: como parte de su llegada a Europa, la UE pagará a Intel la suma de 6.800 millones de euros para construir su sitio de producción. Dada la cantidad que costará este proyecto, Infineon claramente no necesitará tal financiación, pero todavía está esperando un pequeño impulso europeo. Gracias a sus inversiones, la Unión Europea espera alcanzar el 20% de cuota de mercado en este sector para 2030, cuando actualmente pesa solo el 10%.
Gracias a su fábrica, la empresa alemana quiere producir semiconductores grabados en 300 mm, muy útiles en la industria del automóvil, a partir de 2026. su comunicado de prensa, Infineon considera que la construcción de su planta generará 1.000 puestos de trabajo adicionales. El gobierno alemán, que participó en el proyecto, espera que Infineon también produzca componentes electrónicos para controlar remotamente las palas de las turbinas eólicas. De hecho, el país presentó recientemente su proyecto para desplegar aerogeneradores lo más rápido posible en territorio alemán para compensar su falta de hidrocarburos y lograr sus objetivos climáticos.