Los grupos de estudiantes que visitan Bruselas son una característica de la ciudad. Visitan las instituciones comunitarias, aprenden cómo funcionan y conocen a sus directivos. Sin embargo, los jóvenes apenas están uniformados. Los graduados de la escuela militar Nunziatella fueron una excepción. Por primera vez, en los últimos días la célebre institución, fundada en 1787 por iniciativa de Fernando IV de Borbón, ha organizado una visita a la capital europea para sus alumnos.
“El futuro es cada vez más europeo y cada vez más interconectado”, señala el comandante de la escuela, el coronel Giuseppe Stellato, de 46 años. “Por lo tanto, queríamos permitir que nuestros estudiantes tocaran de cerca el contexto internacional y la complejidad del aparato institucional de la Unión Europea”.
Las instituciones visitadas
En el viaje desde Nápoles participaron 47 de los 49 alumnos que serán llamados a aprobar el examen de bachillerato a finales de este año académico (dos estaban enfermos). La visita duró cuatro días y permitió a los alumnos visitar, entre otras cosas, la Comisión, el Parlamento, el Servicio Europeo de Acción Exterior (EEAS), la representación diplomática italiana ante la Unión Europea, la Real Escuela Militar de Bélgica y también la OTAN.
El viaje fue promovido por algunos eurodiputados italianos, entre ellos la popular Lucia Vuolo y el socialista Giuseppe Ferrandino, y sobre todo dos antiguos alumnos, ahora funcionarios de la UE, Renzo Console y Ugo Celestino.
En un contexto italiano marcado en los últimos años por la frialdad, cuando no el escepticismo, hacia la Unión Europea, la visita adquiere un significado particular.