Mientras soplan vientos de guerra desde las gasolineras con el cierre patronal de las gasolineras fijado -y nunca cancelado- del 24 al 26 de enero próximo, se suaviza el apretón de las sanciones a los operadores que infrinjan las normas de transparencia. Para ayudar a los consumidores, el ministerio está estudiando una aplicación gratuita sobre los precios de la gasolina y el diésel con geolocalización.
La app y el Observatorio
La herramienta que está desarrollando el ministerio permitirá conocer el precio medio regional y, gracias a la geolocalización, también el precio que cobra cada distribuidor de proximidad.
La hipótesis de una App pública estaría entre las que están sobre la mesa, junto con la introducción de un mecanismo con el código QR, para superar el quid de la obligación de mostrar el precio medio autonómico en las estaciones de servicio. De acuerdo a lo aprendido, la hipótesis permitiría una fácil elección al impedir que el automovilista se acerque a las vallas publicitarias para consultar el precio con el código QR, al mismo tiempo representaría una base de datos con la cual sería posible que las autoridades realizar seguimientos, controles y eventualmente intervenir.
Entre las herramientas ya operativas, cabe recordar que laobservatorio de precios de combustibles con precios constantemente actualizados y los establecimientos más cercanos.
Hacia la relajación del endurecimiento de las sanciones
Por su parte, el ministro Adolfo Urso ha realizado nuevas aperturas a representantes de categoría. Los cambios a la nueva legislación propuestos por el Gobierno aliviarían la trampa de las sanciones. La obligación de comunicar los precios de las gasolinas será semanal (y no diaria) y en cada cambio de precio.